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CRÍTICA

'Un viaje de diez metros': El MasterChef del cine

Lasse Hallström nos trae una película donde juega perfectamente con el sentido de la vista para atraernos hacia unos platos exóticos y de alta cocina. Estreno en cines, el 26 de septiembre.

Por Custodio Guerrero Quesada 25 de Septiembre 2014 | 10:30

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Algunos le conocerán por las nominadas al Oscar 'Mi vida como un perro' o 'Las normas de la casa de la sidra', o incluso por la famosa película en la que Johnny Depp se dejaba endulzar por el chocolate preparado por Juliette Binoche en 'Chocolat'. Pero ahora Lasse Hallström vuelve a la cocina del cine para encandilar a sus fans con la comida hindú y la alta cocina de Francia.

Un viaje de diez metros

La historia de 'Un viaje de diez metros' gira en torno a Hassan, un ingenuo profesional culinario de la cocina hindú. Tras un triste acontecimiento, se mudará a Londres para terminar finalmente en un pueblo del sur de Francia. Allí abrirá su padre un restaurante hindú enfrente de uno francés con una estrella Michelin. Así comenzará una historia entrañable donde la rivalidad y la familia se verán involucrados entre sartenes y fogones.

Oprah Winfrey, Steven Spielberg y Juliet Blake han formado así un gran equipo para producir esta cinta culinaria al más estilo MasterChef, sobre una persona sin título ninguno de cocina que quiere hacerse hueco en los fogones más elegantes de Francia.

El guión es simple y fresco con toques de humor bien avenidos, con una impasible Helen Mirren y un hilarante Om Puri. Pero no solo va de cocina, también hay cabida a temas como el racismo, las oportunidades de la vida, la familia y, claramente, el amor con una pizca de rivalidad entre medias.

Un viaje de diez metros

En cuanto al aspecto gráfico, los colores están muy bien tratados en la película, aprovechando así los vivos de la comida hindú para mostrar la alegría y lo exótico de India, en contraposición con los colores de la alta cocina francesa, siendo más minimalista en este aspecto.

Un recorrido gastronómico

El montaje está condicionado por las necesidades culinarias de los protagonistas, por lo que los picados y los primerísimos detalles abundan bastante. Hay que hacer una especial mención al detallado travelling de la escena del restaurante hindú, donde Halsström lo ejecuta perfectamente no teniendo nada que envidiar a otros famosos travellings del cine.

Así pues, a Helen Mirren no le tiembla nada el pulso para demostrar que puede con todo y sobre todo con un restaurante francés galardonado con una estrella Michelin. Manish Dayal y Charlotte Le Bon son la guinda del pastel de esta película donde a los más fanáticos de la cocina no les dejará nada indiferentes.