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RODAJES ECARTELERA

Eduardo Noriega, de 'Los miércoles no existen': "La comedia es el método perfecto para hablar de cosas importantes casi sin darte cuenta"

Charlamos con el actor Eduardo Noriega acerca de su participación en la comedia romántica con toques musicales 'Los miércoles no existen', del director y guionista Peris Romano.

Por Daniel Lobato Fraile 20 de Noviembre 2014 | 12:50

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Eduardo Noriega es uno de los nombres propios de 'Los miércoles no existen', primer largo en solitario del director Peris Romano (junto a Rodrigo Sorogoyen escribió y dirigió '8 citas'), con el que abraza la comedia y canta junto a William Miller, Inma Cuesta, Gorka Otxoa y Alexandra Jiménez entre otros. Un género al que el actor confiesa tenerle ganas: "Me apetecía mucho hacer comedia, y creo que tengo una vis cómica a desarrollar". Aunque matiza que "en esta película mi personaje es el más dramático".

Eduardo Noriega e Inma Cuesta

"La película es bastante fiel a la obra. No ha habido grandes cambios", comenta Noriega acerca de esta producción que antes fue obra de teatro y antes guion cinematográfico. Un montaje teatral que vio hasta en dos ocasiones y que le interesó mucho "porque me hacía reír, pero me hablaba de otras cosas".

"Habla de relaciones de pareja y todos nos podemos sentir identificados en un momento u otro con algún personaje", añade al respecto. Profundizando en la comedia como género, asegura que si no perfecto, sí es un método muy atractivo para "hablar de cosas importantes casi sin darte cuenta".

La improvisación en el cine

Eduardo Noriega da también una interesante reflexión acerca del arte de la improvisación y el "mito" que hay en torno a esta en el cine. "Por mi experiencia en los sets, hay muy pocas cosas que vayan a la improvisación. La técnica cinematográfica de marcas, de luces, de focos... creo que hasta hay un mito con esto de la improvisación. 'No, no, tal actor improvisa muy bien'. Tal actor improvisa muy bien, pero si ha improvisado la cámara no lo ha retratado, seguro. Porque ni el cámara sabía adonde iba, por tanto no lo ha iluminado, ni el foquista le ha podido pillar. Es una improvisación entre comillas. A partir de una improvisación sí puedes hacer una secuencia o recrear esa improvisación que te gustó, pero creo que improvisación, en general, hay poco en el cine. A no ser que se trabaje expresamente para la improvisación. Y que se deje total libertad".

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