La temporada de premios cinematográficos está dando sus últimos coletazos, pero una de las citas más esperadas por las estrellas es la gala de los Fotogramas de Plata. La veterana publicación mensual reúne todos los años a los rostros más importantes del cine, la televisión y el teatro para hacer entrega de los galardones a las mejores interpretaciones del año.
Un año más, Anabel Alonso hizo de maestra de ceremonias, y una vez más demostró ser toda una experta en la materia, apareciendo vestida del personaje del anime 'Magical Girl', pieza clave de ese puzzle que es la película de Carlos Vermut. La actriz lo dejó claro desde el principio: aquí venimos a pasarlo bien, ya está bien de quejarse.
Aunque sí hubo una reivindicación, que vino por parte de Carlos Areces. El actor confirmó que iba a presentar un premio en los Goya de este año, pero se negó porque le obligaban a firmar que no se saltaría una coma del guión. Aprovechó que los Fotogramas sí le dieron libertad total y pidió una mayor defensa de la libertad de expresión, y se quitó la espinita de decir lo que quería decir en los Goya: "Alex O'Dogherty, no vuelvas a hacerlo", refiriéndose a su desastrosa actuación musical.
Pocas sorpresas en el palmarés
Nosotros fuimos testigos de esta noche, quizás la ceremonia de premios más distendida del calendario, y aprovechamos para charlar en la alfombra roja con los ganadores del Goya, para descubrir cómo han vivido los días siguientes a su gran noche. Como marcaban las quinielas, Bárbara Lennie y Javier Gutiérrez volvieron a llevarse el premio esa noche. En cuestión de películas, 'La isla mínima' y 'Boyhood' fueron elegidas las mejores películas española y extranjera por los críticos, mientras que 'Ocho apellidos vascos' fue la favorita del público, lógicamente.
