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CRÍTICA

'Ciudades de papel': Más que amor, una aventura

La segunda adaptación de una obra de John Green llega a la gran pantalla. Q es un joven que se enamorará de la enigmática Margo. En cines el 14 de agosto.

Por Diego Alfonso Pizarro Da Costa 1 de Agosto 2015 | 12:28

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Son muchas las adaptaciones literarias que se están dando en el mundo del cine. Algunas con más éxito que otras, pero sin duda, un punto fuerte es la literatura juvenil. Desde 'Los Juegos del Hambre' con un mundo distópico, también nos encontramos con otro tipo de novelas como 'Bajo la misma estrella' o en este caso, 'Ciudades de papel'. John Green ha conseguido convertirse en uno de los autores con más éxitos del panorama actual.

'Ciudades de papel'

Con la adaptación de 'Bajo la misma estrella', el universo Green vio la luz con un buen recibimiento tanto de la crítica como del público. Para esta ocasión, son Nat Wolff y Cara Delevingne quienes recogen el testigo de Shailene Woodley y Ansel Elgort como la pareja protagonista. Al igual que pasó con 'Bajo la misma estrella', el telón de fondo vuelve a ser un romance juvenil.

La película se centra en la extraña relación entre Q y Margo que, unidos cuando eran niños, empezaron a distanciarse, convirtiendo durante su adolescencia su relación en casi inexistente. Margo, durante un arrebato tras enterarse de la infidelidad de su novio, comenzará una noche de venganza y diversión junto a Q. Al día siguiente Margo desaparecerá, dejando algunas pistas que Q seguirá para poder ir a su encuentro.

'Ciudades de papel' tiene todos los ingredientes para convertirse en otra película edulcorada de comedia romántica juvenil con que tan bien tienen acostumbrado los estudios a su público, pero no es así. Jake Schreier ha sabido "engañar" a los espectadores, pero de forma que no le cause molestia sino al contrario, que le sorprenda al mejorar las expectativas que había. Encontramos una road-movie juvenil, donde el amor queda en un segundo plano, por lo que lo importante es mostrar los problemas de la adolescencia, el final de una etapa, el sabor agridulce de la entrada a la universidad al saber que hay muchas cosas que no volverán.

La elección del reparto ha sido adecuada, sobre todo en el caso de los amigos de Q, que por primera vez, aunque se trate de los 'frikis' de clase, parece que tienen la edad que dicen tener. Aun así, volvemos a encontrar algunos clichés como los populares cachas, las divinas estupendas y las fiestas de locura americana, pero al no estar en un primer plano no se hace pesado e irreal.

 'Ciudades de papel'

Las interpretaciones de Cara Delevingne y Nat Wolf son las más presentes durante el film, extrañamente Wolf ha sabido tomar el control de la película y aunque su carisma no sea el mayor que haya entre los actores juveniles, da un ápice de realismo esa dejadez y pasotismo que muestra en muchas escenas. Delevingne en cambio es todo lo contrario, en cada escena que aparece consigue dejar huella, no siendo necesaria su participación en otras tramas para estar presente. Un torrente que entra con gran fuerza, algo habitual con la presencia de la actriz que debuta positivamente en este cinta. La química entre los actores es evidente, aunque en un principio pueda parecer que no pegan ni con cola.

Cuidado del entorno

Desde mi punto de vista, 'Ciudades de papel' supera a 'Bajo la misma estrella'. Pese a que la premisa principal de la película de Josh Boone es más dura que la que se da en el film de Jake Schreier, la estructura narrativa ha seguido en 'Ciudades de papel' de manera más atractiva, consiguiendo que el espectador quede más impresionado con la cinta. Los gags cómicos y nostálgicos aportan todavía más vida a esta adaptación, no focalizándose únicamente en la trama principal de Q y Margo, sino yendo más allá y cuidando las historias paralelas y secundarias. El drama está presente, pero ha sabido mezclarse con el resto de elementos para dar un respiro al espectador y dar el buen rollo que es necesario en este tipo de filmes.

La conclusión del film, al igual que el libro, es una de las razones por las que se podría decir que nos encontramos ante una situación más realista, pese a los sucesos rocambolescos que viven los protagonistas, ya que no se da importancia a una sola cosa como podría ser el amor o a los momentos vividos con la persona amada, sino que enseña que hay mucho más, que es importante sí, pero que hay otros factores que marcan la personalidad durante la juventud como pueden ser la amistad, la conformidad, la lucha por saber quién eres, que en este largometraje consiguen tratarse de alguna u otra forma. Película recomendable tanto a jóvenes como a adultos.