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CRÍTICA

'Máquina de guerra': ¿Teléfono rojo? Volamos hacia Afganistán

Netflix estrena 'Máquina de guerra', una feroz sátira bélica protagonizada por Brad Pitt y dirigida por el autor de 'Animal Kingdom'.

Por Antonio Miguel Arenas Gamarra 31 de Mayo 2017 | 18:39

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En la primera secuencia de 'Animal Kingdom', la película con la que el cineasta australiano David Michôd se dio a conocer en todo el mundo, un adolescente parecía ver absorto la televisión en el sofá. Instantes después, la irrupción de un equipo médico en el domicilio alteraba la escena y nos descubría que su madre, aquella mujer que presuponíamos yacía dormida a su lado, había fallecido víctima de una sobredosis de heroína. Pese al salto drástico que ha llevado a cabo con 'Máquina de guerra', ambientada durante la Guerra de Afganistán, esa capacidad para bordear la sordidez de un hecho trágico hasta tornarlo mundano no solo la mantiene intacta, sino que se prolonga a lo largo del metraje de esta eficaz sátira bélica, basada en hechos reales, con la que Netflix nos recuerda sus posibilidades subversivas.

Las consecuencias del artículo de Rolling Stone que costara su cargo al General Stanley McChrystal, puesto en 2009 al mando de las tropas de la OTAN en Afganistán, sobrevuelan un guión que sabiamente toma distancia de lo estrictamente periodístico, acumulando momentos disparatados mediante un montaje de alto ritmo narrativo. En contraste, Michôd trata de añadir una fina lectura política a su impronta, ahondando en el vacío y la frustración que hay detrás del absurdo de la guerra. Algo ejemplificado en la brillante conversación donde uno de los soldados, tan desconcertado como lo estará el espectador, se cuestiona en voz alta cómo es posible intentar llevar la paz y la democracia al país afgano cuando al mismo tiempo tratan a la población civil de posible amenaza.

Brad Pitt en Máquina de guerra

Producida y protagonizada por un desatado Brad Pitt, dueño y señor de la función, moldea su personaje a través de su particular técnica de running y de unos histriónicos tics faciales. Métodos con los que afila su vis cómica y trata de tomar distancia del auténtico General en el que se inspira, lo que por momentos resulta contraproducente y acentúa en exceso el carácter satírico de la propuesta, dando lugar a una de las primeras películas post-Obama que advierte con descaro las grietas de su mandato. La crítica a la indecisión del ex-presidente durante la contienda es translucida, levantando voces discordantes dentro del ejército hacia su gestión a las que la película pone rostro. Uno al que no nos costaría ver entusiasmado con el "Make America Great Again" que llevó a Donald Trump a la presidencia.

¿El no-estilo Netflix?

El reciente auge de Netflix en la producción de largometrajes está generando debates de todo tipo, pero uno de los más enconados, al que incluso los propios cineastas no encuentran fácil respuesta, nos lleva a preguntarnos hasta qué punto afecta rodar una película pensando en su estreno para la gran pantalla o en streaming. Y aunque 'Máquina de guerra' no ofrezca un cambio de paradigma al respecto, sí que parece estar diseñada para atraer desde el principio la atención de la audiencia de su plataforma. Su inicio, que presenta con una sarcástica voz en off a su protagonista y la insólita cuadrilla que le acompaña en la misión, está dispuesto para cautivar al espectador e introducir el tono de la manera más efectiva posible, consciente de que los primeros minutos son fundamentales para evitar perderse en el fondo del catálogo.

Aunque cabría esperar una mayor ambición cinematográfica, David Michôd evita precisamente cualquier seña de estilo personal para aproximarse a un planteamiento formal naturalista. Un no-estilo que, lejos de expulsar al espectador de la propuesta, sirva de entretenimiento con el que invitarle sin darse cuenta a reflexionar sobre el eco socio-político de sus imágenes. En ese sentido, y pese al empeño de Brad Pitt por lo contrario, hay que reconocerle su esfuerzo para no dejar de resultar verosímil, indagando en la relación de los soldados con el pueblo afgano y logrando articular el absurdo en un terreno en el que pese a todo, los errores tienen graves consecuencias.

Máquina de guerra

Una de las curiosidades que extendió el citado artículo consistía en que la película favorita del General McChrystal era 'Pasado de vueltas'. Es motivo de celebración que en el fondo el resultado se asemeje más a la estupidez intrínseca de las comedias protagonizadas por Will Ferrell y dirigidas por Adam McKay, con una pizca del didactismo de 'La gran apuesta' y el espíritu imperecedero de '¿Teléfono rojo?: Volamos hacia Moscú' (toda la película, y por ende también la historia militar más reciente de los Estados Unidos, podría entenderse como una sucesión de cruentas decisiones que nadie en sus despachos reconoce haber tomado), que al fallido dislate de 'Los hombres que miraban fijamente a las cabras' o el planteamiento lúdico de 'Tres reyes'. Dos ejemplos con los que en un principio podría compararse y a los que supera.

En conclusión, 'Máquina de guerra' se desenvuelve con sumo acierto en la mezcla de géneros y de tonos, merced al notable manejo de la voz en off y de la música incidental, recursos desde los que otorga nuevos y jocosos matices a su afilada reflexión, pero también nos deja en el aire varios apuntes brillantes. Entre ellos, el rol que cumplen las únicas dos mujeres que hacen acto de presencia: la abnegada mujer del General y la lúcida política alemana interpretada por Tilda Swinton. Ellas son quienes arrojan las escasas muestras de sensatez de la película. Y por último, aunque podamos caer en la trampa de creer que esa obsoleta máquina de ganar guerras a la que alude el título es su protagonista, su memorable broche final nos recuerda que no importa quién esté al mando, la auténtica máquina de guerra nunca dejará de ser otra que los propios Estados Unidos de América.

Nota: 7

Lo mejor: Su tono es más inteligente y subversivo de lo que parece.

Lo peor: Se conforma con entretener pese a vislumbrarse mayores posibilidades cinematográficas.

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