Y sigue...

Mostrada íntegramente en blanco y negro, esta secuela sigue el mismo patrón nauseabundo y asqueroso de la primera parte. Es explicita pero al no haber diferencia de colores de los varios...fluidos que abundan constantemente, considero que pierde un poco. Impacta un poquito menos pero sigue siendo igual de retorcida. Tal vez deba tomarme esta secuela en b/n como experimentación hacía lo underground o...a saber. También cabe destacar que es posible que debido al cambio de protagonista pueda considerarse casi cómica. Dentro del humor negro, Martin roza el ser un bufón, mientras que en la anterior película el Doctor era de lo más serio, duro y siniestro. Nuevamente nombro el blanco y negro para añadir algo positivo, tiene una de cal y una de arena, y es el que hace del film algo más claustrofóbico y en una película así esa sensación es necesaria para captar al espectador y dejarlo " satisfecho ".