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CLUB DE CINE

'Tigre y dragón', el renacer del cine de artes marciales

Ang Lee firma una gran película heredera de la tradición wuxia que alcanzó enorme éxito de crítica y público en Occidente.

Por 27 de Noviembre 2012 | 09:18

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Esta semana dedicamos nuestro Club de Cine a Ang Lee, realizador de probada polivalencia que este viernes estrena en España 'La vida de Pi', una de las películas más esperadas del año. Ganador del premio Oscar al mejor director por 'Brokeback Mountain', el cineasta taiwanés ha destacado a lo largo de su carrera con títulos de prestigio tanto dentro del mercado de Hollywood como en sus propias fronteras. Así, en eCartelera repasamos dos de sus cintas asiáticas más celebradas: 'Tigre y dragón' y 'Deseo, peligro' (jueves).

Tigre y dragón

'Tigre y dragón' es una película de artes marciales del año 2000 rodada en China que alcanzó un incontestable éxito global. Con un presupuesto de unos escasos 17 millones de dólares, recaudó más de 200 millones en todo el mundo, buena parte de ellos provenientes del mercado americano a pesar de haber sido rodada en mandarín y con actores locales. Aceptación del público estadounidense que también compartió la Academia de Hollywood al nominarla a un total de 10 categorías en los Oscar, incluyendo mejor película y director, resultando finalmente ganadora de 4 estatuillas: mejor película de habla no inglesa, dirección artística, fotografía y banda sonora.

El argumento sigue a Li Mu Bai (Yun-Fat Chow), un legendario experto en artes marciales que ha decidido legar su maravillosa espada mágica. Este guerrero está enamorado de su compañera Yu Shu Lien (Michelle Yeoh), sin embargo, ambos han sentido que no pueden expresar sus sentimientos ya que en el pasado ella fue la prometida de su maestro, muerto a manos de la despiadada Zorra de Jade. Li Mu Bai juró vengar el trágico asesinato, una oportunidad que se le presenta cuando Jen (Zhang Yiyi), una joven aristócrata que anhela vivir aventuras pero está a punto de casarse, puede ser la responsable del robo de la espada.

El género wuxia

La película toma la tradición wuxia, algo así como una analogía de los samurais japoneses, caballeros de las artes marciales en relatos que reunen acción, aventuras, romance y artes marciales dentro de la China antigua. En muchas ocasiones, los elementos fantásticos cobran gran importancia en la historia. En el caso de 'Tigre y Dragón', las habilidades de esos guerreros les permiten saltar por los tejados y muros moviéndose con una facilidad sobrehumana debido a los conocimientos transmitidos en la montaña Wudang.

Tigre y dragón

Conceptos como la lealtad y el honor forman parte del código de lucha. La indisciplina de Jen motiva los conflictos de la película, debido a que en varias ocasiones tanto Mu Bai como Shu Lien ceden en sus acciones de protección. Y es que aunque desde el inicio del relato saben que Jen es la responsable del robo de la espada, su talento juvenil es visto como una buena oportunidad de instruir a un nuevo guerrero. Esto depara espectaculares escenas de lucha llenas de saltos, acrobacias y duelos de espada. Y aunque la presencia de movimientos gracias a la ayuda de cables sea descaradamente perceptible, eso no impide el disfrute de las trabajadas coreografías.

Una espectacularidad cuyo éxito de audiencia posibilitó la aparición de películas de corte similar en posteriores años: tanto los 'Hero' y 'La Casa de las Dagas Voladoras' de Zhang Yimou, pasando por 'El monje' y 'Ong Bak', y terminando por el díptico 'Kill Bill' de Quentin Tarantino, 'El último samurái' o 'Zatoichi', siempre salvando las distancias.

Tigre y dragón

Y es que en definitiva, 'Tigre y Dragón' es una obra clave dentro de la evolución reciente del cine de artes marciales. Si de algo de presumir la película de Ang Lee es haber sido impulsora de este fenómeno y de conectar con la audiencia occidental no sólo con peleas, también con pasionales tramas amorosas. Y a pesar de que me fascina ese comedimiento con los sentimientos de los dos protagonistas, servidor se queda con ese visceral enamoramiento entre Jen y el bandolero, un fragmento con ecos de western que termina adquiriendo entidad propia en la película.

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