å

CRÍTICA

'Las ventajas de ser un marginado': Bienvenido a la isla de los inadaptados

Stephen Chbosky realiza la adaptación de su propia novela, y gracias a ello logra la película que Charlie, Sam y Patrick merecen. Una historia "teen" con trasfondo adulto y aire alternativo.

Jesús Agudo
Por Jesús Agudo Más 2 de Diciembre 2012 | 12:08
El redactor más veterano de esta web. Palomitero y fan de que las series estrenen un capítulo por semana.

Comparte:

Ver comentarios (29)

Muy pocas veces se puede tener la suerte de contar con el propio escritor de una novela encargándose de la adaptación cinematográfica. Se suele contar con su ayuda en más de una ocasión, pero no llega al nivel de ser él mismo el que la dirija. Y en historias tan especiales como 'Las ventajas de ser un marginado', que Stephen Chbosky haya sido el artífice de su versión en celuloide es el doble de importante.

Las ventajas de ser un marginado

Gracias al estreno de la película, por fin podremos conocer en nuestro país la historia de Charlie, un chico que comienza su primer día de instituto con la cruz en su espalda de ser el chaval cuyo mejor amigo se suicidó el pasado verano. Charlie estuvo ingresado por no saber afrontarlo y recordarle al momento en el que perdió a su tía, su persona favorita en el mundo. Todo parece un infierno, hasta que conoce a Sam y Patrick, dos hermanastros a los que no les importará el pasado de Charlie, sino su personalidad.

Antes de que todas las historias protagonizadas por adolescentes estuvieran monopolizadas por algún factor sobrenatural, existían relatos como el de Chbosky, con personajes reales con problemas reales. Charlie y el resto de protagonistas de la película forman un conjunto de "bichos raros", pero cuyo rasgo más extraño es no querer dejarse llevar por lo que le digan los demás.

Las ventajas de ser un marginado
'Las ventajas de ser un marginado' muestra cómo varios jóvenes siguen luchando por sus sueños y confían en una amistad que no se rige por la popularidad, ni por la normalidad. Todos cuentan con muchas sombras, lo que hace más rica la interpretación de Logan Lerman, Emma Watson y Ezra Miller. Los tres sobresalientes en su papel, llenan de sentimiento cada escena, algunas de ellas de una intensidad bastante fuerte, donde cualquiera de los tres supera las expectativas.

Espíritu "hipster"

Esta "oda a lo raro" consigue imponer una atmósfera seria a una película adolescente, haciendo por fin una película "teen" que no es fácil de digerir, que tiene unos momentos en los que, como la vida misma, un joven tiene que sacar su lado más adulto. Gran parte de ello se consigue con una impecable banda sonora, coronada por canciones "infinitas" como "Heroes" de David Bowie. Tanto la estética, con el 'Rocky Horror Picture Show' por bandera, como el sonido otorgan un aire "hipster" que hará las delicias de estos amantes de lo independiente, lo alternativo, o más comúnmente denominado, lo "diferente".

La mayor parte de todos estos logros hay que agradecérselo al director porque, si tenemos la oportunidad de leer su novela, descubriremos que algo tan personal no lo podría haber adaptado nadie más. 'Las ventajas de ser un marginado' es el claro ejemplo de ver a un libro cobrar vida ante nuestros ojos. Obviamente con sus ligeros cambios, pero que en esencia nos traslada al pensamiento de ese chico inadaptado que podríamos haber sido cualquiera de nosotros.

En el fondo, la película no deja de ser la historia de un grupo de adolescentes poco comunes y cómo afrontan los problemas de la amistad, el amor, la familia o el futuro. Pero 'Las ventajas de ser un marginado' también es una película intimista, adulta, bastante dura en ocasiones y llena de un espíritu tan emotivo que es muy difícil no sucumbir ante ella.