å

RECORTES

El Gobierno da una nueva estocada al cine español con más recortes para 2014

Los Presupuestos Generales del Estado recortan los fondos para la cinematografía hasta los 48,21 millones, un 12,72% menos que el año pasado, en el que recibió 55,03 millones.

Por Carlos Manuel Hernández Fernández 30 de Septiembre 2013 | 16:13

Comparte:

Ver comentarios (6)

El cine se ha llevado el mayor golpe tras la partida de los Presupuestos Generales del Estado, que ha presentado el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. En este nuevo ejercicio, la Cinematografía recibirá 48,21 millones de euros, lo que supone un 12,72% menos que el curso pasado, en el que recibió 55,03 millones.

Cristóbal Montoro

Este descenso en el presupuesto destinado al cine, se suma a la bajada que ya padeció en 2012, que fue incluso mayor: del 22,6% respecto a 2011. En aquel año la Cinematografía contaba con 71,11 millones de euros de presupuesto: este curso será de 22,9 millones menos.

Año crítico

La cifra con la que dispondrá el Fondo de Protección a la Cinematografía, órgano gestionado por el Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) para próximo ejercicio será de 33,7 millones de euros, en lugar de los 39,13 millones de euros con los que contó en 2013, lo que supone también un descenso del 13,9%.

Los festivales de Málaga y Huelva mantienen los 100.000 y 80.000 euros fijados respectivamente, mientras que el Festival de San Sebastián aumenta en 20.000 euros su presupuesto, hasta los 900.000 euros (pese a que en 2012 contó con un millón de euros).

Mientras que el teatro o la música ven aumentadas sus cantidades respecto a este año, la caza de brujas contra el cine español por parte del Gobierno continúa. Resulta irónico que, el día que se anuncia otro tijeretazo a un sector que sigue desangrándose, sea también el último día que los míticos Cines Renoir Cuatro Caminos de Madrid proyectarán alguna película. A partir de mañana tendrán el cartel de "cerrado" en sus puertas. Una nueva víctima de la crisis, para la que ninguna parte parece estar encontrando una solución.