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CRÍTICA

'Matar al mensajero': Jeremy Renner atormentado

Jeremy Renner protagoniza este thriller periodístico basado en la historia real del reportero Gary Webb que destapó el acuerdo entre la CIA y los capos de las droga en los 80.

Por Piedad Milicua González 13 de Noviembre 2014 | 11:01

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Michael Cuesta se ha curtido dirigiendo capítulos de series de televisión como 'Homeland' y 'Dexter', entre otras, lo que está muy presente en su nueva incursión en el cine. De hecho, los títulos de crédito te recordarán mucho a la cabecera de la primera.

Jeremy Renner y Paz Vega

Sin duda, el mayor atractivo de 'Matar al mensajero' reside en que está basada en una historia real. Un nuevo enfrentamiento entre la CIA, que guarda sucios secretos de estado, y los medios de comunicación, que se ven en la obligación de contarlos. Estos, están representados por Gary Webb, un reportero de un pequeño periódico local de California, el San Jose Mercury News, que descubre que la agencia de espionaje estadounidense se alió con los capos de la droga durante los años 80, para financiar a la Contra nicaragüense, que derrocó a su gobierno.

Con un ritmo trepidante desde el primer segundo, Cuesta hace uso de todos los ingredientes de un buen thriller, para llevarte a lo largo de la investigación y de la vida de Webb, que se ve seriamente afectada por ésta. Porque no es una película sobre conspiraciones políticas, ni sobre los daños colaterales que provoca el gobierno estadounidense con sus decisiones, es una cinta sobre el periodismo y su enfrentamiento con la verdad.

Matar al mensajero
El verdadero Webb se suicidó en el 2004, aunque se duda de que fuese un suicidio, ocho años después de que se publicase el artículo que le llevó a la fama, con todos los premios de periodismo posibles bajo el brazo, incluso dos Pulitzer, pero con una carrera profesional y familiar completamente destrozadas. Y aunque en la película, no entran a valorar si fue o no un asesinato, ni siquiera van más allá del año 1996, eres capaz de ver que la vida de Webb lo va a pagar muy caro por atreverse a plantar cara a una de las agencias de espionaje más temidas del mundo. El plano de la escalera mecánica lo dice todo.

Un actor infravalorado

Desde que en 2008 protagonizase la ganadora del Oscar, 'En tierra hostil', Jeremy Renner ha estado presente en muchas de la grandes producciones de los últimos años, ya sea 'Los Vengadores' o la nominadísima 'La gran estafa americana', pero sin embargo, el pobre nunca ha conseguido sobresalir, rodeado como estaba siempre de actores más guapos, más altos o con más talento.

Pero Renner nunca desaprovechaba ninguna oportunidad para brillar y por fin, le ha llegado su momento gracias a Cuesta. A pesar de que en 'Matar al mensajero' también está rodeado de grandes veteranos, como Ray Liotta o Andy Garcia, nadie le roba el protagonismo, ya que son meros secundarios que le ayudan a ir construyendo su personaje, un padre de familia con una fuertes convicciones y un pasado que le atormenta, que deberá elegir entre su imagen pública y su vida. Por fin la cámara le apunta directamente a él, y Renner lo aprovecha como mejor sabe.

Entre los secundarios también cabe destacar a la impresionante Paz Vega, cuyo personaje breve, pero fundamental, le permite sacar a relucir toda su pasión latina que la convierte en una femme fatale, que se come todas las escenas en las que aparece.

En conclusión, si te gustan los thrillers aderezados con conspiraciones sobre el gobierno americano y su famoso lema de "el fin justifica, los medios", tienes que ir al cine, y si no, también, porque nunca está demás conocer los sacrificios de esas pocas personas que todavía tienen principios.