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CRÍTICA

'El libro de la vida': Una fiesta continua

Llega 'El libro de la vida', una película de animación bajo la producción de Guillermo del Toro. Nominada al Globo de Oro a 'Mejor película de animación'.

Por Diego Alfonso Pizarro Da Costa 18 de Febrero 2015 | 11:04

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Una de las apuestas infantiles con más fuerza para este 2015 llega a las salas el 20 de febrero. Bajo la producción de Guillermo del Toro, llega una película que intentará acercar al público a la cultura mexicana y a dar un razonamiento de cómo funciona el mundo y los distintos estados que tiene. Una fábula moderna para todos los públicos.

 'El libro de la vida'

Este cuento peculiar se abre con la visita de unos niños al museo, pero, una azafata convencerá a su compañero de ser ella la que haga la visita, llevándoles a una parte del museo un tanto especial. Allí encontrarán un libro que recoge todas las historias sobre la vida, ciertas y no tan ciertas, y una de ellas será la explicación de cómo funciona el mundo de los vivos y el de los muertos.

Con esta introducción, la película sitúa al espectador sobre lo que va a ver, llevándole a ser un oyente más junto a los niños. La historia comienza con la celebración del día de los muertos, se explica que hay tres reinos: el Reino de los vivos, el Reino de los Recordados gobernado por La Catrina y el Reino de los Olvidados, gobernado por Xibalba.

La relación de amor-odio entre estos dos gobernantes provocará que decidan apostar el futuro de sus reinos, apostando cada uno por un joven para que enamore a la bella María, aún siendo niños éstos. Manolo y Joaquín serán los niños escogidos, que años después de la ida de María y su posterior regreso, tendrán que demostrar ambos la valía que tienen y superando las diferentes pruebas que se les ponga por delante, ya que el destino y el equilibrio del mundo, además del destino de su pueblo, están en sus manos.

Este cuento infantil interactivo ha sido realizado gracias a Jorge R. Gutiérrez pero además, en su doblaje original ha contado con estrellas del continente americano con una amplia carrera cinematográfica como Diego Luna, Zoe Saldana, Channing Tatum y figuras mexicanas importantes como Kate del Castillo, Ana de la Reguera y hasta el mismísimo Plácido Domingo, que aunque no es mexicano sino español, no podía faltar a esta celebración 'Made in Mexico'.

La animación de la película es bastante curiosa y original, en cierta forma recuerda un poco al estilo de Tim Burton y 'La novia cadáver', pero la conjugación de colores, estilos y la forma en la que han sido realizados los personajes, dota de personalidad al film, destacando por este motivo, ya que es complicado renovar o reutilizar algo ya hecho y convertirlo en tuyo. Consiguen no dar esa sensación sombría y lúgubre que suele percibirse cuando se habla del mundo de los muertos, sino que lo trata como un escalón más de la vida, e inclusive como el estado de máxima emoción y disfrute si te encuentras en el Reino de los Recordados. Sin duda, una de las mejores cosas del film.

 'El libro de la vida'

La historia, en cierta manera, recuerda a un especial de una serie de televisión, como una especie de capítulo largo pero no tiene todos los elementos para ser un largometraje. El problema es que la trama es demasiado cerrada, empieza y acaba según termina la narración, aunque en los últimos minutos deje la puerta abierta a la verosimilitud de lo que se ha contado en ese mundo animado. Es una fábula visual, busca la manera de inculcar a los más pequeños la importancia de ser uno mismo y luchar por lo que uno quiere, pero el problema es que los personajes están demasiado idealizados, no se equivocan y siempre consiguen la manera de que no sea su culpa sino la del otro o del resto, incluso los antagonistas, Xibalba y Joaquín no terminan de ser imperfectos, ya que inclusive su imperfección está ensalzada, cometen errores pero sin maldad y consiguen el perdón por su 'buen fondo'. Los villanos del film es lo mismo, pero al contrario, son los malos malísimos que no tienen escrúpulos ni respeto por nada. Podrían haber dotado de mayor personalidad a la historia y no mostrar algo demasiado endiosado, sino algo más humano, se vuelve a ver al héroe con final trágico, que al final consigue vencer todos los obstáculos.

Aun así, hay que destacar que no se hace una película pesada y es bastante entretenida, un film que acerca internacionalmente, a la sociedad, la cultura mexicana, con sus celebraciones y costumbres, dando pie a que pueda entenderse por qué la importancia de ese día en su cultura, pese a que utilice elementos fantásticos, también puede analizarse desde la parte más sensitiva. Para ellos recordar a sus muertos es motivo de celebración, ya que significa que siguen con ellos aunque no estén en cuerpo presente, y esto es algo que deja claro la película.

Entre toros y guerras, un poco de dosis de comedia

Otro de los aspectos positivos de la película son las pequeñas dosis de chistes, 'gags' y comedia que hay en el film, se demuestra que no hay una única función educativa y de interés cultural sino que también hay ese interés por el entretenimiento, de relajación al espectador, ya que estamos hablando de una película, sobre todo, dirigida para el público infantil, por lo que es importante que los niños puedan pasárselo bien y aprender sin darse cuenta, por lo que estás pequeñas dosis aportan ese dinamismo necesario en este tipo de películas, dando un ritmo más activo y resolutivo.

Las referencias culturales se suceden en la película en la figura de los personajes principales: los toros, los bandidos, los héroes de época y acompañan a la estética, por ejemplo, en el Reino de los Recordados se puede ver como los esqueletos están diseñados bajo las directrices de cómo son decorados en la festividad en la vida real, por lo que hay una conexión cultural bastante fuerte que se ha planificado de forma correcta para que los diferentes elementos encajen entre sí.

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