Borja Cobeaga parece estar dispuesto a romper todos los tabúes que durante años han imperado en la vida política vasca y nacional a base de hacernos reir. Si con el archiconocido programa de ETB2 'Vaya semanita' se atrevió a hablar sin complejos sobre la izquierda abertzale o el nacionalismo español, en 'Negociador' se mete de lleno en las conversaciones que hicieron posible el final de ETA. Un tema que podría herir sensibilidades si no fuese porque Cobeaga ha entendido que la mejor manera de acabar con los prejuicios es desde el humor.
La comedia ha servido, a lo largo de los años, para abordar algunos temas delicados o directamente tabú buscando en todo momento la complicidad y la comprensión del espectador. Obviamente, no podemos esperar que estos retratos tengan el mismo enfoque de las comedias protagonizadas por Kate Hudson. Están, en todos los casos, enmarcadas bajo un tono (muy) negro.
Repasamos cinco clásicos con temas que jamás sacarías a tu cuñado en la cena de Nochebuena:
ABUSOS SEXUALES: 'Happiness' (Todd Solondz, 1998)
¿Se puede hablar de abusos y perversiones sexuales en el contexto de una comedia coral aparentemente inocente? En 'Happiness', Solondz se aventura en las vidas de unos personajes aparentemente anodinos, grises y de clase media. Sin embargo, más allá de la cotidianidad se esconden oscuros secretos familiares que van saliendo a la luz a base de diálogos mordaces y brutales giros de guión. Una comedia sobre las miserias del ser humano y uno de los primeros trabajos de Philip Seymour Hoffman.
HITLER Y EL NAZISMO: 'Los productores' (Mel Brooks, 1967)
Comedia y musical, ésta es la propuesta de Mel Brooks para reirse del mismísimo Hitler. Para ponernos en situación, dos productores de Broadway en horas bajas urden un plan para salir de la quiebra estrenando la que será considerada como la peor y más ruinosa obra jamás estrenada. Además de contar con actores de tercera, los productores tiene claro cuál será el elemento disuasorio definitivo: elogiar la figura de Führer. 'Primavera para Hitler' será el título con el que estos productores buscarán quedarse con el dinero una ancianas en esta sátira sobre las miserias en del mundo del espectáculo.
RELIGIÓN: 'La vida de Brian' (Terry Jones, 1979)
Sólo los Monty Python serían capaces de revisar la obra y milagros de Jesucristo a través de Brian, un hombre corriente que es confundido con el mesías. Desde ese punto de partida se desarrollan una sucesión de gags y escenas delirantes que perfilan a un personaje patético que sólo pasaba por allí. Obra cumbre de la comedia, 'La vida de Brian' es un inteligente repaso por la fe y la sociedad moderna.
LA GUERRA FRÍA: 'Telefono rojo ¿volamos hacia Moscú?' (Stanley Kubrick, 1964)
En plena paranoia por la guerra nuclear y el miedo a un ataque de la Unión Soviética, Stanley Kubrick se atrevió a parodiar las entretelas políticas del Gobierno de los Estados Unidos aprovechando la vis cómica de Peter Sellers. El actor se pone en la piel del Doctor Strangelove, un científico nazi que colabora con el Gobierno para frenar el avance del comunismo en esta parodia tan brillante como divertida.
ASESINATO: 'Turistas' (Ben Wheatley, 2013)
Esta comedia negrísima se estrenó en España sin pena ni gloria pero es un esperpéntico retratos sobre una pareja de turistas británicos aparentemente inofensivos que, accidentalmente, comienzan a encontrar realmente excitante el asesinato de todo aquel que se topa en su camino. Dos guiris de manual que emprenden una escapada de fin de semana para huir de sus tristes vidas y que termina con un reguero de sangre aderezado con diálogos delirantes.
