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SEMINCI 2015

Robert Guédiguian explora las heridas del genocidio armenio en la Seminci 2015

La película 'Une histoire de fou' reivindica la causa armenia y legitima la acción terrorista contra el gobierno turco.

Por Jorge R. Tadeo 27 de Octubre 2015 | 10:25

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La tercera jornada de la Semana Internacional de Cine de Valladolid cedió el protagonismo a las directoras y a las tramas sociales y reivindicativas. El certamen presentaba ayer una obra iraní y otra palestina en la sección oficial competitiva en la que irrumpieron también los veteranos Margarethe von Trotta y Robert Guédiguian. Este último, un habitual de la Seminci, presentó un controvertido film histórico sobre las heridas del genocidio armenio y el terrorismo como respuesta legitimada a la opresión. La comentamos a continuación junto con el resto de films vistos ayer en Valladolid.

'Une histoire de fou' (Robert Guédiguian, Francia)

 'Une histoire de fou'

Nombre imprescindible del cine social europeo y cineasta aficionado a meter el dedo en la llaga cuando aborda temáticas de índole sociopolítica, Robert Guédiguian presentó el domingo en Valladolid un ambicioso film sobre el genocidio armenio y el terrorismo asociado a la causa armenia frente al negacionismo del gobierno turco, cuyo guion se inspira en la novela 'La Bomba' del periodista y escritor gallego José Antonio Gurriarán, que estuvo presente en la rueda de prensa de presentación de la película.

'Une histoire de fou' arranca con una dramatización histórica que contextualiza el conflicto y simboliza la legitimidad de la lucha armada frente a la posición turca. El debate sobre tan incendiaria postura no existe, pues el film tan solo enfoca el conflicto moral sobre los daños colaterales de los atentados y la escalada del terror en los setenta por parte de la facción más dura de los grupos terroristas armenios. Además de lo discutible (o cuando menos matizable) de su agresivo discurso, Guédiguian cae en lo folletinesco a la hora de armar el drama personal que envuelve su tesis y no dedica el suficiente metraje a explicar la conversión de la víctima francesa a la causa armenia por la vía del perdón. Fallida.

Nota: 5

'Nahid' (Ida Panahandeh, Irán)

 'Nahid'

Segunda película de la iraní Ida Panahandeh, 'Nahid' sigue los pasos de una joven divorciada y madre de un niño de 10 años, que busca reencontrar el amor mientras lucha por sacar adelante a su hijo, intentando subsistir con un humilde salario de mecanógrafa y recurriendo a diversas astucias y chanchullos para pagar el alquiler.

Se trata de un drama familiar contextualizado dentro de la sociedad iraní, narrado desde una óptica femenina, haciendo hincapié en los prejuicios de género y clase que aún dominan la cultura persa. Correctamente dirigida e interpretada, el planteamiento de su conflicto es más sugestivo que su desarrollo y resolución, pues resulta por momentos reiterativa y encuentra en la vuelta al punto de origen un desenlace simbólico pero poco convincente.

Nota: 5

'Degradé' (Arab & Tarzán Nasser, Francia - Palestina)

'Degradé'

Otra historia de mujeres en el mundo islámico que forma parte de la sección oficial es 'Degradé', película francopalestina que nos sitúa en un salón de belleza de Gaza, donde un grupo de mujeres parlotean sobre sus problemas y sobre el estado de las cosas en la franja mientras en el exterior resuena el sonido de los drones israelíes.

Aunque su premisa pueda recordar a la libanesa 'Caramel', el film carece del encanto y la solidez narrativa de aquella y se conforma con exponer un conjunto de microhistorias de escaso interés y nulo desarrollo, que conforman un batiburrillo ruidoso pero irrelevante, culminado con un estallido de violencia discutiblemente ubicado en la trama. Prescindible.

Nota:4

'El mundo abandonado' (Margarethe von Trotta, Alemania)

'El mundo abandonado'

Tras el notable biopic sobre la figura de la historiadora y filósofa Hannah Arendt, esperábamos algo sólido de la cineasta alemana Margarethe von Trotta, que participa en la sección competitiva con 'El mundo abandonado', un film que explora temas tan alemanes como los conflictos identitarios y la emergencia de pasados ocultos y viejas heridas sin cicatrizar. Sin embargo, el guion es tan endeble en el desarrollo de la intriga y su realización tan plana, que por momentos nos asalta la impresión de estar ante un telefilm de sobremesa.

La protagonista, interpretada por Katia Riemann, da vida a una cantante de jazz que busca junto a su padre a una misteriosa mujer que guarda un gran parecido con su madre, recientemente fallecida. La protagonista viaja a Nueva York para encontrarse con esta cantante de ópera, que se mostrará inicialmente reacia a escarbar en su pasado familiar. Su simbología es en exceso obvia, su intriga previsible y su dirección televisiva. Un film tan monótono como irrelevante.

Nota: 3