Después de que ya se haya celebrado la gala es muy fácil decirlo pero, verdaderamente, la alfombra de una importante entrega de premios, más allá de los aciertos irremediables y los fallos catastróficos, siempre parece augurar el triunfo o el fracaso de los nominados. Este año en los Screen Actors Guild Awards ha habido dos casos claros de "voy vestida para triunfar" y "sé que me han nominado por pena". Hablamos de la ganadora del galardón a la Mejor Actriz de Reparto Alicia Vikander y la nominada a Mejor Actriz de TV movie Nicole Kidman. Y es que, más allá del gusto personal, Vikander lucía estupenda con su vestido de lentejuelas, mientras Kidman parecía ir asumiendo por delante que no iba a pisar el escenario... Tenemos que planteárnoslo así porque sino no nos explicamos la elección de la actriz australiana.
Pero Kidman no fue ni mucho menos la única que no acertó demasiado con su modelo, porque la gran mayoría de las asistentes patinó irremediablemente con su vestido. Sobre todo hubo mucho caos en lo que al color se refiere, porque, aunque hayamos dejado a Sofia Vergara y Laura Prepon fuera de esta lista de lo peor y lo mejor, bien podrían incluirse en el equipo de los NO rotundos debido al tono de su modelo. El fucsia unido a la exuberancia es demasiado, lo mismo que la blanca palidez generalizada asusta... Difícilmente se puede plantear un ejemplo mejor de lo mal que puede ir tanto el defecto como el exceso de color.
Y diréis, "¿pero si Vergara y Prepon iban tan poco favorecidas cómo es que no están en la lista?", sencillamente porque ha habido intérpretes con vestidos aún menos acertados y porque nos daba penita irnos hoy sin elogiar a nadie. Total que hemos decidido mirar con los mejores ojos a Emilia Clarke, Rachel McAdams, Kiernan Shipka o Kristen Wiig, nombres que compensaron el mal gusto generalizado. Eso si, ni con todo el amor del mundo podemos salvar a Lori Petty, Christina Hendricks, Julianne Moore o Mayim Bialik de la criba, porque por más que tratamos de mirarlas con cariño sólo podemos pensar: "¡Pero en qué momento! ¡En que momento sales así de tu casa!".
Mejor y peor vestidas de los Screen Actors Guild Awards 2016
Emilia Clarke
Mayim Bialik
Fallo: La intérprete de 'The Big Bang Theory' no suele acertar demasiado con sus modelos, y la gala de los SAG Awards no fue una excepción. Este Oliver Tolentino negro con detalles dorados, unido a un peinado y maquillaje nada acertados, la hacían lucir como una reina que se ha escapado de su ataúd.
Kristen Wiig
Acierto: La humorista demostró su indudable clase con este modelo de Roland Mouret mientras se aseguraba de dejar claro que no es necesario sacar el vestido de boda para ir estupenda a una gala de premios.
Christina Hendricks
Fallo: Ese Christian Siriano con demasiada tela no favorecía a Hendricks en absoluto. No sólo parecía estar siendo engullida por el edredón de su cama, sino que el color de señorona le hacía parecer mayor.
Rachel McAdams
Acierto: El Elie Saab de la intérprete de 'Spotlight' no sólo nos parece maravilloso, sino que le quedaba realmente bien, casi podemos decir que ensalzaba su personalidad además de su belleza. Estupenda.
Lori Petty
Fallo: La intérprete de 'Orange Is the New Black' eligió este Ashton Michael de estilo militar porque imaginamos buscaba un modelo versátil que lo mismo se pudiese poner para hacer parapente que para ir hecha un verdadero cuadro a una entrega de premios.
Alicia Vikander
Acierto: La ganadora del premio a la Mejor Actriz de Reparto, todo un despliegue de personalidad y estilo, logró conquistar hasta a la actriz Queen Latifah que aseguró que el Louis Vuitton de Vikander era "la bomba".
Nicole Kidman
Fallo: El volumen, la mezcla de tonos rosados y malvas, el brillo, los colgantes de mercadillo... No sabemos que es peor, si el Gucci que eligió Kidman para esta entrega de premios, o los accesorios con los que completó ese gran error de conjunto.
Kiernan Shipka
Julianne Moore
Fallo: Es ver a Moore con ese Givenchy y pensar en una Barbie que tuve. La cola de sirena de quita y pon era de la misma tela exactamente. Eso sí, a mi muñeca le quedaba mejor. La pobre Julianne parece más el monstruo del pantano... La forma, el color, como le queda... Desastre.
