'The Big Bang Theory': Desvelado por qué Sheldon Cooper llama siempre tres veces a la puerta

[AVISO: Este artículo contiene SPOILERS de 'The Big Bang Theory']

La serie protagonizada por Sheldon Cooper se encuentra plagada de detalles que encantan a sus seguidores. Uno de los gags más característicos en 'The Big Bang Theory' se encuentra en el método tan peculiar de Sheldon para llamar a la puerta. Sin embargo, conocidas las numerosas excentricidades del tejano, sus amigos nunca le dieron demasiadas vueltas a ello.

Pues, ciertamente, existe una historia detrás de esa extraña costumbre, y se la desvela a Penny en la serie, concretamente en la última temporada que se emite actualmente. Tal y como cuenta, todo se debe a una situación en la que se encontró un día a los trece años, cuando volvió a casa desde la facultad antes de tiempo. Cuando llegó a su casa, comenzó a escuchar ruidos extraños que emanaban de la habitación de sus padres; abrió sin llamar y se encontró a su padre en la cama manteniendo relaciones sexuales con una mujer que no era su madre. Este hecho, por tanto, le provocó un trauma que desencadenó tal costumbre o TOC.

El maniático Sheldon

Su obsesivo método de llamar a la puerta es, realmente, una de sus múltiples manías. Ha mostrado tantas en la serie que se podrían publicar libros sobre ello. Algunas de sus más conocidas son su sagrado sitio en el sofá, cosa que lo transforma en alguien insoportable si alguien se lo "usurpa"; las estrictamente firmes normas -fijadas en un contrato de convivencia que tiene con Leonard- que marcan desde los horarios para ir al baño hasta de la temperatura del termostato; o la fuerte repulsión que tiene hacia el contacto físico a causa de su obsesión contra los gérmenes.

Con esta duda resuelta, ya conocemos uno de los secretos que Sheldon Cooper llevaba tanto tiempo guardando, y muestra que, como todos saben, aunque sea prodigiosamente inteligente, posee escasas habilidades sociales y los traumas de la infancia enquistados le provocan ciertas actitudes que suelen ser más propias de un niño. Sin embargo, el carisma del personaje interpretado por Jim Parsons le convierte en uno de los personajes más queridos, no solo de 'The Big Bang Theory', sino del mundo de la televisión actual.