'Titanic', 'El quinto elemento' y otras 15 películas que cumplen veinte años en 2017

Paul Thomas Anderson llamó a la puerta de Hollywood con 'Hard Eight', y con 'Boogie Nights' la haría añicos. Su deslumbrante plano inicial y un reparto inmejorable nos sumergieron en esta íntima y épica mirada a la industria del cine pornográfico. Pero fue el impecable trabajo de Anderson el que marcó la diferencia: complejo, personal y, sobre todo, dentro del espectro de la humanidad, con las indisoluble mezcla de humor dentro del drama. Un genio había llegado, y no ha aminorado el ritmo desde entonces.

Roberto Benigni nos regaló uno de los momentos más maravillosos de los Oscar cuando se puso a corretear sobre las butacas de sus colegas al escuchar de los labios de Sophia Loren que 'La vida es bella' había ganado en la categoría de mejor película extranjera. El actor y director italiano había deslumbrado con su agridulce mirada al estallido de la Segunda Guerra Mundial, que se convirtió en un clásico instantáneo por el distintivo toque cómico con el que se había abordado un tema tan espinoso.

Tras el paso de Tim Burton por Gotham, la franquicia de Batman se precipitó a un declive apocalíptico. En 1997 George Clooney se enfundó el traje de camuflaje de Bruce Wayne por primera y última vez, y sus principales némesis fueron los críticos que se ahorraron las palabras delicadas para describir el desastroso resultado de la cinta, que pondría el listón muy bajo para Christopher Nolan.

Luc Besson firmó con 'El profesional (Léon)' su título más sólido hasta el momento en 1994, pero tres años después dio a luz a su película de culto. 'El quinto elemento' nos adentró en una odisea espacial al más puro estilo del ambicioso cineasta francés, que enfrentó a las fuerzas del bien y del mal, con Bruce Willis en uno de sus roles más memorables. Este año veremos el regreso de Besson a las epopeyas exoplanetarias: 'Valerian y la ciudad de los mil planetas'.

Disney se encontraba en pleno resurgimiento noventero cuando aterrizó en los cines 'Hércules'. El estudio había encadenado el éxito de títulos como 'Aladdin' y 'La bella y la bestia', y la fórmula musical había sido clave. Con su revisión de la mitología griega no se olvidaron de introducir pegadizos acordes y letras, que hicieron que el hijo de Zeus se ganara un especial sitio entre los títulos animados del popular estudio.

La carrera de David Fincher también tiene sus rincones oscuros, donde quedó escondida 'The Game'. Este gran thriller pereció a la sombra de 'Seven' y 'El club de la lucha', pero tiene todos los atributos necesarios para considerarse otra exhibición de talento de su responsable, que una vez más demostró su innata habilidad para gestionar la intriga y golpearnos cuando menos lo esperamos.

Cuando pensábamos que en el cine de grandes dimensiones todo estaba inventado, James Cameron dobló la apuesta. Apoyándose en una trágica historia romántica construyó una de las películas más populares de la historia, que reventaría todos los récords de taquilla. Sumando reestrenos, 'Titanic' acumula ya 2.186 millones de dólares, tan solo superados por la otra odisea de Cameron, 'Avatar'. Todavía hay físicos investigando a fondo el misterio de la tabla de madera, ¿cabían los dos?

Will Smith estaba en pleno proceso de dominación del planeta cuando se estrenó 'Men in Black'. El actor filadelfiano demostró su porte como protagonista en 'Dos policías rebeldes' e 'Independence Day', y en esta ocasión se emparejó con Tommy Lee Jones para brindarnos una de las comedias más icónicas de los años noventa, en la que tenían cabida extraterrestres, borrados de memoria y los policías con más estilo.

Un Gus Van Sant al alza se consagró con este film, que impulsó las carreras de Matt Damon y Ben Affleck. Además del Oscar de esa pareja creativa por sus labores de guion, Robin Williams finalmente se hizo con su merecida estatuilla dorada por uno de los papeles más emotivos y completos de su filmografía. Lamentablemente, el siguiente paso de Van Sant fue el infame remake de 'Psicosis'.

La comunión con la naturaleza siempre ha sido uno de los temas centrales del Studio Ghibli, una de las constantes en la fascinante carrera del genial Hayao Miyazaki. Esa preocupación por el maltrato a nuestro entorno quedó más que patente en 'La princesa Mononoke', que contaba con una de las heroínas más aguerridas del cine y con un apasionante relato que solo podía salir de la brillante mente de Miyazaki.

Curtis Hanson demostró un gran dominio del noir con 'L.A. Confidential', que ensambló uno de los repartos más potentes de 1997: Russell Crowe, Kevin Spacey, Kim Basinger, Guy Pearce... Tanto Hanson como Basinger se llevaron sus respectivos premios Oscar a casa, y la película se afianzó como uno de los thrillers más solventes y atractivos de una década en la que la competencia no fue escasa.

'Tesis' fue el anuncio de un joven prodigio del cine español, y 'Abre los ojos' la consolidación del innegable talento de Alejandro Amenábar. 'La niña de tus ojos' la eclipsó en la gala de los Goya, pero Penélope Cruz tenía todas las de ganar en aquella ceremonia. Ese año fue un pilar fundamental en la posterior carrera internacional de la actriz de Alcobendas, que recuperó el personaje de Sofía en el remake estadounidense del film, 'Vanilla Sky', en el que iniciaría su relación sentimental con Tom Cruise.

Al igual que sucede con 'The Game', 'Jackie Brown' puede parecer una obra menor dentro de la bruñida carrera de su director, pero es realmente un poderoso thriller que recupera el espíritu del blaxploitation. Quentin Tarantino venía de ganar la Palma de Oro con 'Pulp Fiction' cuando cambió de tercio y adaptó por primera vez material ajeno. El resultado respira por su propia cuenta y demostró que Tarantino había llegado para quedarse.

Michael Haneke sabe perturbar al espectador como nadie. El cineasta germano hizo lo que le dio la gana con esa idílica familia que veía desgarradas sus vacaciones por la aparición de dos jóvenes que tenían la intención de jugar con ellos a placer. El home invasion más brutal que nos podamos imaginar, encubierto por la elegancia propia de su creador. Tal fue el calado de la cinta que diez años más tarde el propio Haneke realizó un remake literal en tierras estadounidenses.

'George de la jungla' es una de esas películas tan ridículas que acaba teniendo su encanto, sobre todo ante la mirada atenta de un niño. El saltarín salvaje interpretado por Brendan Fraser dio pie a una franquicia que no gozó de gran éxito financiero, pero que brotó de la comedia familiar más taquillera de 1997 en Estados Unidos. Dos años después, 'Tarzan' le disputó su lugar en la jungla a George, pero ambos conviven en nuestra memoria con especial cariño.

Por aquel entonces el flujo de secuelas no era tan abrumador como hoy en día, pero si algo triunfaba había que sacarle provecho. Cuatro años después del rompedor estreno de 'Jurassic Park' llegó a los cines su continuación, 'El mundo perdido', también dirigida por Steven Spielberg. La película no estuvo a la altura de su predecesora, pero en taquilla demostró que el público apoyaba las prolongaciones a toda costa.

Afortunadamente, los noventa fueron años prolíficos para uno de los creadores más enigmáticos de nuestro tiempo. David Lynch comenzó la década con 'Twin Peaks' y alcanzó una de sus cumbres cinematográficas con 'Carretera perdida', que ahondaba en su críptica y lírica visión del medio, desdoblando personajes e indendiando casas. El pan de cada día de uno de los pocos cineastas que se pueden considerar artistas completos.