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QUE NO SEA GRAVE

Chiquito de la Calzada, hospitalizado tras ser rescatado por los bomberos en su casa

La familia de Chiquito avisó a los servicios de emergencia tras no recibir respuesta por parte del artista desde su vivienda.

Por Alberto Cano Rodríguez 15 de Octubre 2017 | 11:14

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El humorista, actor y cantante Gregorio Sánchez, conocido artísticamente como Chiquito de la Calzada, ha sido ingresado de urgencia en el hospital de Málaga Carlos Haya después de ser rescatado en su vivienda por los bomberos tras recibir un aviso por parte de su familia.

La familia del humorista, avisó a los servicios de emergencia sobre las 12 del mediodía del sábado 15 de octubre tras no recibir respuesta por parte del artista y no poder acceder a su vivienda al estar las llaves introducidas en la cerradura desde el interior. Hasta el piso se acercó una dotación de bomberos de Málaga que, tras poder acceder a la vivienda mediante un vehículo autoescala, se encontraron a Chiquito de la Calzada tumbado en el suelo sin poder levantarse por sí solo, aunque en estado consciente.

Chiquito de la calzada

Chiquito, de 85 años de edad, fue trasladado por los bomberos hasta el centro médico, donde hasta el momento, no se ha ofrecido ninguna información sobre el estado en el que se encuentra el artista al no haber recibido la aprobación de la familia, por lo que se desconoce la gravedad de su salud o el parte de lesiones sobre su estado. Aunque según asegura Diario Sur, Chiquito no se encuentra en estado de gravedad.

Su carrera en el cine

A lo largo de toda su carrera profesional, donde ha sobresalido en diversos ámbitos, Chiquito ha destacado por su participación en diversas películas como 'El Oro de Moscú', 'Franky Banderas', 'La venganza de Ira Vamp', 'Spanish Movie' o 'Torrente 5: Operación Eurovegas', donde interpretó papeles con su característico tono cómico además de incluso autoparodiarse a sí mismo. También ha destacado por sus numerosas participaciones en gran cantidad de espacios en televisión así como en series como '¡Ala...Dina!' o 'Mis adorables vecinos', donde realizaba diversos cameos.

Los 7 momentos más surrealistas de 'Torrente'

A la gresca

A la gresca

Cuando estás intentando hacerte el machote delante de tus pupilos, no queda nada bien que un boxeador profesional y su colega con malas pintas tengan la intención de partirte la cara. Por suerte, José Luis Torrente sabe como jugar sucio y noquear al malote de Javier Bardem, e idolatrar lo suficiente a Policarpo Díaz como para que éste le perdone la vida. Un momento que ningún fan del ex-policía puede olvidar y que, naturalmente, solo le podría suceder al personaje interpretado por Santiago Segura.

La pela es la pela

La pela es la pela

El personaje de Torrente es genial en sí mismo, pero, admitámoslo, sus películas tendrían mucha menos gracia si no tuviera a su legión de "amiguetes" para darle vidilla al asunto. Cañita Brava ya es todo un habitual en los productos de Santiago Segura, y ningún fan será capaz de olvidar al camarero agarrado que interpreta. Bueno, al fin y al cabo, solo reclama lo que es suyo. Y es que Torrente parece haberse olvidado de que no le va a servir nada más, porque le debe 6.000 pesetas de Whisky...

Lávate las manos

Lávate las manos

Sin duda, el personaje de Javier Cámara tiene mucho que aprender de la vida, y Torrente está dispuesto a inculcarle su vasto conocimiento. Tras explicarle que la droga no es mala y pegarle a un yonki, José Luis se queda perplejo al ver que Rafi no se lava las manos antes de orinar. Esto da pie a una interesante y científica explicación por parte del ex-policía, en la que le dice que su aparato reproductor es sagrado y hay que reverenciarlo. Y es que, después de todo, los "microorganismos microbianos" acechan. Momentos como este son los que convierten a la primera entrega de 'Torrente' en una obra de culto del cine español.

El taller de costura

El taller de costura

Si Jesús Bonilla desconfía de su mujer, ahí está el mejor investigador privado para contarle toda la verdad. O casi toda. Resulta que sus sospechas eran ciertas, y el personaje interpretado por Cristina Tárrega era prostituta. Torrente, tras pedirle dinero a ésta por no chivarse (y tras un trabajito fino), le comenta al marido que no se preocupe, que su mujer está trabajando en un taller de costura. No cuela, y el ex-policía es sincero y le dice que su señora esposa se dedica a la profesión más antigua del mundo. Cuando a Bonilla le da un ataque y se queda tirado en el suelo, Torrente huye sin contemplaciones. Gran detective y mejor ciudadano.

"Pa" haberse "matao"

"Pa" haberse "matao"

No todo van a ser cameos, y es que, faltaría más, Torrente y su querido amigo Cuco (Gabino Diego) sabían valerse por sí mismos en 'Torrente 2: Misión en Marbella'. O eso pensaban estos pobres diablos. El primo de Cuco, con toda la buena voluntad del mundo, le deja probar un coche al detective, pero el que conducirá será el propio Cuco. No llegarán muy lejos, ya que a los pocos metros vuelcan el coche, provocando la ira del primo y del propio José Luis, que persigue furioso a Cuco. Sin duda, una de las escenas más divertidas de la primera y exitosa secuela.

El Fary es Dios

El Fary es Dios

Ya sabemos lo lejos que puede llegar Torrente protegiendo a su Fary, así que más vale no meterse con el cantante en presencia del brazo tonto de la ley. Tras obrar mal, y ante la atenta mirada de un José Mota que no sabía lo que estaba sucediendo, José Luis tiene una visión de El Fary en 'Torrente 3: El protector'. El cantante le recuerda que él es español, y que necesita echarle valor a una situación muy delicada. Torrente agradece las palabras, pero, tras un emotivo abrazo, El Fary se da cuenta de que el que creía su fan le había "cholao" la cartera.

Del Barça ni mort

Del Barça ni mort

No hay que olvidar que a Torrente le ha llegado a pasar de todo, y hasta ha tenido la peor pesadilla que un fascista anti-catalán y del Atleti puede sufrir: despertarse y hablar en catalán, tener una foto colgada de Jordi Pujol y ser un fanático del Barça. Por suerte para él, todo fue un mal sueño, pero muy real. Hasta estaba allí Andreu Buenafuente para darle su bienvenida al fantástico mundo catalán, del que Torrente prefiere estar alejado. Sin duda, una de esas escenas divertidísimas que todo el mundo recuerda.