Primer avance del crossover entre 'Scandal' y 'Cómo defender a un asesino'

Una de las razones por las que amamos es a Shonda Rhimes es porque nos gustan las tragedias, y de las buenas. Es así de simple. Queremos ver a gente sufriendo y sabemos que con ciertos capítulos de Rhimes es necesario sentarse cerca de los pañuelos de papel porque vamos a llorar de lo lindo. Es única para crear dramas superlativos, historias difíciles de superar en la vida real.

Shonda Rhimes escribe sobre personas, pero sobre todo de mujeres. En sus series ellas son protagonistas, son fuertes, son capaces de superar a un ejército de hombres. Y encima pueden hacerlo sin que se les corra la máscara de pestañas. Sus personajes son el tipo de personas que existen en la vida real, pero no las estereotipadas que suelen predominar en las series de televisión.

El amor es importante en las historias de Shonda Rhimes, pero la amistad mucho más. En sus series se ve cómo son esas las relaciones que perduran, las que importan. Da igual que sean gladiadores, alumnos de Derecho o "mi persona". El amor puede ser temporal, pero a los amigos siempre se puede recurrir.

Los personajes de Shonda Rhimes pueden gustarte, puedes sentirte identificado con ellos o puedes odiarlos. Lo que está claro es que no te dejan indiferente. Y eso no se aplica únicamente a sus protagonistas, sino a todos los roles principales de una serie. Y así es como consigue que sufras y llores con ellos o aplaudas desde el sofá cuando hacen algo que deseas.

Shonda Rhimes es una de las personas que más ha hecho en los últimos años por dar un espacio en la tele a gente de color. Es una de las personas de color con más poder en la industria de la televisión y lo ha aprovechado para favorecer la igualdad de razas.

Las protagonistas de Shonda Rhimes son tan fuertes y valientes como ella. Si sus creaciones se atreven con todo ella no podía ser menos. No tiene miedo a tratar en sus series ningún tema, aunque sea controvertidos o de plena actualidad. El aborto, los derechos de los gays o la corrupción política han sido ampliamente tratados en sus series de televisión.

A Shonda Rhimes le debemos haber descubierto a muchísimos actores: Katherine Heigl, Kate Walsh o Kerry Washinton son algunas de las actrices que le deben su carrera, pero no sólo ha potenciado a mujeres. A ella le debemos que el doctor macizo (Patrick Dempsey) llegara a nuestras vidas. Rhimes sabe que un buen drama necesita a uno o varios guapos en la serie.