La compra de 21st Century Fox por parte de Disney ha revolucionado el mundo del cine y la televisión esta semana, y es solo el principio. Mientras los espectadores nos preguntamos si los X-Men y los Vengadores se juntarán o si Anastasia es o no una princesa Disney, la realidad es otra muy distinta: se espera que se pierdan hasta 4.000 puestos de trabajo en una industria que no necesita precisamente un golpe así.
Es una adquisición que le ha costado a Disney 71.300 millones de dólares y que acerca a la compañía presidida por Bob Iger a un monopolio que muchos analistas consideran peligroso no solo para la industria del entretenimiento, sino para la libertad del público. Pero los primeros afectados son los empleados de la productora de Fox, 20th Century Fox, que ya están empezando a ser despedidos, según cuentan medios como The Hollywood Reporter o Variety (que titula un dramático artículo así: "Los despidos de Fox dejan a los empleados aturdidos y entristecidos").
El diezmo en 20th Century Fox (como también se llamó al chasquido de dedos de Thanos, curiosamente) ha empezado por arriba, con cabezas de departamentos como el presidente de distribución estadounidense de 20th Century Fox, Chris Aronson, al que le han dado 60 días de aviso. También se van al paro Pamela Levine (presidenta del marketing a nivel global), Kevin Campbell (copresidente de marketing), Tony Sella (jefe de contenido), Andrew Cripps (presidente de la distribución internacional), Dan Berger (vicepresidente de comunicaciones corporativas), Bob Cohen (vicepresidente ejecutivo de asuntos legales y de la filial teatral Fox Stage) y Heather Phillips (vicepresidenta ejecutiva de prensa). En televisión dice adiós el presidente de 20th Television Greg Meidel. Por último, se queda sin trabajo Jim Fielding, el jefe de Productos de Consumo de Fox, una división que Disney va a absorber al completo y en la que se ha despedido a 5 personas, el 10% del equipo, mientras que el resto se espera que se queden en Disney.
Algunos empleados de 20th Century Fox se quedarán para una etapa de transición que durará entre tres y seis meses, y no se sabe cuántos se quedarán en Disney de forma permanente. Se esperaba que los departamentos de marketing, distribución y home entertainment fueran los más afectados, ya que muchos puestos de trabajo se solaparían con los de Disney.
La compañía del ratón se ha propuesto llegar a 2021 ahorrando hasta 2.000 millones de dólares anuales en Fox, gran parte de esto gracias a los despidos. Los analistas más contrarios a Disney auguran entre 5.000 y 10.000 pérdidas de empleo en los próximos años.
También en España
El golpe no solo afecta a Estados Unidos. En 20th Century Fox España se espera también una reducción del personal, con equipos como marketing y prensa perdiendo sus trabajos en favor de los mismos departamentos de Disney.
Como punto positivo, los analistas también hablan de la esperanza que supone Disney+. La plataforma de streaming con la que Bob Iger planea hacerle frente a Netflix (y que de momento no se sabe qué planes tiene a escala global) debería suponer nuevos empleos en el futuro.
