Oda a 'Amanecer de los muertos', la joya de Zack Snyder

En 2004, el nombre de Zack Snyder todavía no era reconocible por nadie, pues 'Amanecer de los muertos' fue su ópera prima.

Totalmente entregado a la causa, el realizador hizo una exhaustiva inmersión en el proyecto, realizando storyboards de la gran mayoría de las secuencias que quería rodar, con el fin de ser lo más fiel a la idea que tenía en la cabeza.

El hecho de remakear un título de culto de George A. Romero, hizo que se mirase con lupa el trabajo, el cual sorprendió para bien por la forma en la que actualizaba la propuesta de 1978.

Fue el productor Eric Newman, un fan confeso de 'Zombi', quien quiso llevar adelante un remake con la intención de acercar el título original a las nuevas generaciones, y a la vez contentar a los amantes de este.

Newman acabó asociándose con el productor Marc Abraham, con quien convenció a Richard P. Rubinstein, el productor de la película de Romero, para que les cediese los derechos y así poder hacer su versión. Este quedó encantado con el entusiasmo que ambos demostraron en la película y su intención por hacer algo que respetase a la original.

James Gunn fue contratado para escribir el guion de la película, para el cual se involucró aunque no todo lo que los productores quisieron.

El entonces guionista, que había empezado a trabajar en las filas de la Troma, había sido el responsable del guion de 'Scooby-Doo', por ello después de haber terminado con el de 'Amanecer de los muertos', no pudo cumplir las exigencias de los productores, quienes quisieron que potenciara ciertas relaciones entre personajes y se explayase en otras de acción.

¿El motivo? Gunn se decantó por darlo todo para escribir 'Scooby-Doo 2: Desatado', teniendo que contratar a Scott Frank y Michael Tolkin para que hiciesen algunas reescrituras.

A diferencia de lo que hizo George A. Romero a finales de los setenta, teniendo que rodar 'Zombi, el amanecer de los muertos vivientes' durante las noches en las que el centro comercial estaba cerrado, los productores de 'Amanecer de los muertos' tuvieron claro que debían encontrar un lugar en el que poder filmar sin problemas.

Para ello, iniciaron una exhaustiva búsqueda de centros comerciales abandonados en el Reino Unido, Japón e incluso Rumanía, donde iba a resultar mucho más barato rodar. Finalmente, el equipo de producción encontró Ontario (Canadá) el sitio idóneo en Thornhill, el cual fue totalmente remodelado para dar cabida a la historia.

Teniendo en cuenta que el centro comercial de Thornhillya contaba con marquesinas de marcas reales, el equipo de producción tuvo que pedir permiso a estas para ver si querían que sus nombres saliesen en la película.

Mientras que Panasonic o Roots no pusieron ningún inconveniente, Starbucks se negó a que su marca estuviese presente en el film, teniendo que renombrar la cafetería. El propio Zack Snyder llegó a decir que veía lógico que algunas empresas no quisieran que su nombre se asociase al de una película tan sangrienta.

Para la secuencia en la que el personaje de Sarah Polley cura la herida a Ving Rhames, Zack Snyder contrató a una enfermera real para que le "cosiera" la herida, para así filmar las manos en primer plano y dar mucho más realismo a la secuencia.

Ante la orden de que tenía que hacerlo más profundo, la enfermera atravesó con la aguja la piel del actor, quien en ningún momento se quejó y se mantuvo impasible durante el rato que la cámara filmaba. Evidentemente, Snyder incluyó la secuencia en el montaje final.

Si por algo destacó 'Amanecer de los muertos', además de por la brutalidad con la que sus muertos eran presentados (siendo estos una vuelta de tuerca al zombi moderno, un cruce entre los zombis de George A. Romero y los infectados de '28 días después'), fue por el maquillaje que se utilizó para caracterizarlos.

Con un equipo de cerca de cincuenta maquilladores, se emplearon varios tonos de sangre, que iban desde la más roja a la más negra, y para el maquillaje se tuvieron en cuenta imágenes reales de cadáveres en accidentes y de morgues, para así dotar de realismo a las criaturas, pudiendo considerarse las técnicas como pioneras a lo que luego se haría en 'The Walking Dead'.

Uno de los personajes que todo el público recuerda es el de la mujer obesa que revive (y que podría haber sido inspiración para la que pudimos ver en '[REC]' tres años más tarde).

Por obra y gracia del maquillaje y las prótesis, el monstruoso personaje consiguió dar escalofríos, pero muchos se sorprenderán al descubrir que, en realidad, estuvo interpretada por el actor Ermes Blarasin.

Ante la emoción de los productores y algunos de los responsables del título original, Zack Snyder fue el primero en esperar la respuesta de George A. Romero, a quien había querido homenajear en su remake.

El padre del zombi moderno no se cortó un pelo a la hora de hablar de lo que le había parecido la película, asegurando que le pareció que tenía un inicio prometedor y que, durante los primeros momentos de encierro en el centro, todo iba bien hasta su tramo final, el cual le pareció "demasiado precipitado, sin alma y parecido a un videojuego", echando en falta algo de crítica social, tal y como él había hecho en todas sus producciones.

Si hubo algo que consiguió la película, fue el hecho de meterse a público y crítica en el bolsillo. En su primer fin de semana, logró superar su presupuesto de 28 millones de dólares y acabó recaudando en todo el mundo un total de 102. La prensa especializada atribuyó grandes méritos a la película, como por ejemplo el ser respetuosa con la original a la vez que actualizaba el concepto del zombi moderno.

Zack Snyder iba a ser el productor de una secuela, 'Army of dead', cuyo rodaje se pospuso debido a que este se volcó de lleno en 'Watchmen'. Finalmente el proyecto se abandonó y parece ser que ahora acabará viendo la luz para Netflix, con Snyder como realizador.