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SITGES 2007

Orient Express: 'A battle of wits'

'A battle of wits' es una película épica en muchos sentidos, con un profundo mensaje antibelicista y un despliege de efectos y extras digno de elogio.

Por Óscar Martínez 8 de Octubre 2007 | 22:07

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Dirigida por Jacob Cheung Chi-Leung, 'A battle of wits (Muk gong)' es una coproducción entre China, Japón y Corea del Sur interpretada por Andy Lau, Ahn Sung-ki, Wang Zhiwen, Fang Bingbing y Choi Si-won.

En la antigua China, durante una época dominada por los señores de la guerra, la pequeña ciudad de Liang se interpone en el camino del poderoso ejercito Zhao. Ante el inminente asedio, los defensores de Liang solicitarán la ayuda de los Mozi, un grupo de guerreros especialmente dotados para la estrategia. La llegada de Ge Li renovará las esperanzas pero su desastrada apariencia y su desdén por la violencia también alentarán la desconfianza.

Las aproximadamente dos horas que dura 'A battle of Wits' dan, ciertamente, para mucho.

Sin dar tregua alguna al espectador, la película comienza con unas breves líneas que nos sitúan en la época e introducen a nuestro particular héroe, Ge Li, iniciándose un asedio a la ciudad fortificada de Liang que no se detendrá durante algo más de una hora: la ingente masa humana producto de los extras y el CGI del ejército Zhao se precipitan una y otra vez contra las exíguas defensas de Liang, que sobrevive a cada uno de los embites gracias al ingenio del Mozi.

Como si de una versión asiática de la batalla del Abismo de Helm se tratase, 'A battle of Wits' entremezcla con bastante fortuna embites con disputas palaciegas, en la que los diferentes personajes pecan, eso sí, de ser bastante arquetípicos.

Así pues, nos encontramos con un rey engreído y orgulloso, que no duda en conceder con forzada soberbia el mando de su ciudadela al Mozi, incapaz de reconocer que su vida y su reinado dependen de ello; por otro lado tenemos al príncipe, tan orgulloso como su padre además de impetuoso, si bien su amistad con Ge Li le hará compartir su causa y comprender a su pueblo. En el mismo bando, hallamos a Liang Shi, una mujer que acabará comandado la caballería pesada del ejército de Liang, inmersa en una batalla moral por demostrar su valía como mujer. Y, cómo no, Ge Li, a unos escasos centímetros de alzanzar la beatificación si no fuera porque ciertas dudas existenciales combaten en su interior con su fe en el amor universal.

Pero, a pesar de los tópicos y de no tener excesivos efectos especiales ni coreografías espectaculares ni oníricas escenas en clave espiritual, como ocurre con las películas de Zhang Yimou, 'A battle of wits' es una película más que digna y de muy fácil visionado, que no defraudará en lo más mínimo a aquéllos que vayan a verla.

A pesar de no poseer un ritmo trepidante ni mucho menos, la película de Jacob Cheung Chi-Leung no llega a decaer en ningún momento, entremezclando tácticas de combate con las anteriormente citadas intrigas palaciegas y, eso sí, un descafeinado romance que, afortunadamente, en ningún momento salvo quizá en el clímax final llega a anteponerse a una acción sin tregua de mensaje marcadamente antibelicista.