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BASADO EN HECHOS REALES

'Campeón (Secretariat)', drama de manual

La inspiradora historia del caballo que ganó la Triple Corona llega moldeada por todos los convencionalismos formales de Disney.

Por Laura Sande 18 de Febrero 2011 | 16:06

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Walt Disney Pictures defiende desde sus inicios unos valores donde la tolerancia, el respeto y la amistad son predominantes. El estudio impregna todos sus largometrajes de ellos y se encarga de transmitirlos en un formato respetuoso con todo el que pueda pagar una entrada y con ello hacer caja sin sorprender demasiado. 'Secretariat' es un nuevo ejemplo de la típica película Disney de superación donde, como no podía ser de otra manera, todo acaba bien.

Diane Lane y Secretariat en Campeón
La cinta está dirigida por Randall Wallace, responsable de 'Cuando éramos soldados' y 'El hombre de la máscara de hierro', que vuelve con su película más homogénea hasta la fecha. En esta ocasión, el guionista de 'Braveheart' no está detrás de la historia, que Disney ha preferido encargar al guionista Mike Rich, todo un profesional en correctos dramas de superación como 'Me llaman Radio', 'The Rookie' y 'Descubriendo a Forrester'.

'Secretariat' está basada en la historia real de Big Red, uno de los caballos de carreras más importantes de la historia, que logró hacerse con la Triple Corona en 1973 con unos tiempos de récord que todavía no han sido igualados. La hazaña del caballo discurre paralela a la de su dueña, Penny Chenery, una ama de casa de clase media que dejó sus estudios universitarios para formar una familia.

Chenery vuelve al hogar de su infancia tras la muerte de su madre y decide hacerse cargo de las caballerizas invirtiendo toda su fe en Big Red, el nuevo potro del establo, hijo y nieto de grandes sementales. La mujer se enfrentará así a su marido y su hermano, que no la creen capaz de convertir al caballo en un campeón, y a compañeros de profesión que se mofan de tener a un ama de casa en el mundo de las carreras. Diane Lane se pone al frente del reparto con una interpretación tan correcta como olvidable, acompañada por un desaprovechado John Malkovich como entrenador que intenta dar un toque cómico sin demasiado efecto.

Diane Lane en Secretariat

Este clásico esquema de superación viene aderezado por una banda sonora sin demasiadas luces que recurre al clásico 'Oh Happy Day' para infundir algo de sentimentalismo en las escenas clave. Lo mejor de la cinta deberían ser los caballos, pero están tan desperdiciados como el resto de la historia y sólo contadas tomas a cámara lenta del portentoso animal logran destacar entre las casi dos horas de película.

'Secretariat' se queda entre los estándares Disney, siendo tan correcta en sus formas como en su capacidad de entretenimiento, y creando así otro producto para consumir en familia, sin sobresaltos y sin entusiasmar a ninguno.