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CRÍTICA

'Sweat': Los influencers también sufren

Crítica de 'Sweat', dirigida y escrita por Magnus von Horn. Protagonizada por Magdalena Kolesnik. Mostrada en la Sección Oficial del 17 Festival de Cine Europeo de Sevilla.

Miguel Ángel Pizarro
Por Miguel Ángel Pizarro Más 21 de Mayo 2021 | 09:05
Colaborador de eCartelera. Apasionado del cine y la cultura en general. Cine europeo y de animación, mi especialidad.

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Tras realizar con éxito su debut como cineasta, la estupenda 'Después de esto', el sueco Magnus von Horn continúa ahondando en la realidad de las nuevas generaciones. Afincado en Polonia, su segundo largometraje lo ambienta en el país centroeuropeo: 'Sweat', un esmerado retrato de la vida de los influencers. Con el sello de la Selección Oficial del Festival de Cannes 2020 y mostrada en la Sección Oficial del Festival de Cine Europeo de Sevilla, Horn da un paso hacia delante y, sin duda, se posiciona como uno de los cineastas más interesantes de la generación actual.

Sweat

Horn, que también escribe el guion, opta por salirse de lo previsible respecto a lo que narra. Lejos de miradas escépticas de los peligros de la red y de estar conectados 24 horas a las redes sociales -tema que ya se han explorado en películas como 'Ojalá te mueras' o 'Clara y Claire'-, 'Sweat' se enfoca en cómo viven los influencers delante y detrás la fama que adquieren y cómo la gestionan. Un aspecto poco explorado es que se trata de un trabajo a tiempo completo, en el que el protagonista -en este caso, una entrenadora de fitness- apenas puede dividir lo que es realidad y lo que es ficción.

La dificultad de construir un personaje y vivir con él todo el día es uno de los aspectos que más destaca en este drama que retrata esa realidad que se ha tocado desde puntos de vista críticos, escépticos o, directamente, cínicos. La nueva fama y cómo gestionarla y los aspectos positivos y negativos que representa. Es ahí donde pone el foco Horn, que durante toda la trama actúa casi como si fuera un miembro del público más, uno de los seguidores de Sylwia.

Un largometraje que explora la realidad de los influencers desde el respeto

Y ahí está otra de sus virtudes. La entrega de su actriz protagonista es magnífica. Magdalena Kolesnik consigue transmitir que es una auténtica influencer. La actriz sabe interpretar esa dualidad que viven estos creadores de contenido, así como también la constante conversación que mantiene consigo misma sobre buscar el cuerpo imposible, mantenerse en forma y, simplemente, aceptarse a uno mismo.

Sweat

Tres elementos con los que Kolesnik hace equilibrios dignos de una acróbata, al mostrar la espontaneidad con la que Sylwia es capaz de confesar a sus seguidores lo sola que se sienta y poco después lanzar un vídeo de cómo preparar un buen batido de proteínas (con su correspondiente Product Placement). Además, Horn no olvida los aspectos negativos, de cómo el convertirse en una especie de Personal Branding andante hace que la joven sea incapaz de no ser el centro de atención o relacionarse con la gente testeando qué es lo que busca, eso sin contar con el machismo del siglo XXI y como este se ha transformado también, entrando ahí el factor del clásico acosador o de cómo compañeros influencers suyos la siguen viendo como un trozo de carne.

Muchos temas en solo tres días -lapso de tiempo que abarca la película- de una influencer. 'Sweat' es esa película que muestra que toca acercarse a las nuevas realidades virtuales de forma más cordial, sin obviar sus aspectos negativos pero también valorando el esfuerzo que hacen estas personas. Un sólido segundo filme con el que el sueco se posiciona como una figura muy a tener en cuenta, como en su momento lo fueron Kornél Mundruczó o Ruben Östlund.

Nota: 8

Lo mejor: La escena final, magistral ahí Kolesnik.

Lo peor: Infravalorarla por su temática y por no ser más crítico con la realidad de un influencer.

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