Dos de las principales cadenas de exhibición cinematográfica de España están apostando por un nuevo concepto de sala de cine en nuestro país. El pasado 2017, Yelmo Cines inauguró su primera sala "Luxury" en su complejo de Plaza Norte 2 en Madrid, apostando por una sala de cine-restaurante donde los espectadores pueden disfrutar de una película en sofás de cuero reclinables mientras disponen de un completo menú de comida. Por su parte, Cinesa ha decidido introducir también este tipo de sala premium en sus cines de Xanadú en Madrid buscando una experiencia similar a la que ofrece Yelmo.
A raíz de la apuesta por estos cine-restaurante, el diario El País publicó un artículo exponiendo todas las características que este concepto de sala trae consigo. Esto generó que gran cantidad de usuarios en redes sociales, mayoritariamente espectadores habituales de salas de cine, salieran a denunciar las malas prácticas y consecuencias que trae consigo este concepto de "cine de lujo" por el que están apostando Yelmo o Cinesa.
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Entre las numerosas quejas, los usuarios señalan que estas salas luxury no hacen más que "devaluar la experiencia" de ir a ver una película al cine, señalando cómo se terminan anteponiendo otros aspectos por encima del ir a ver una película. Además, se critica muchos de los aspectos de su funcionamiento, como la presencia de camareros rondando por la sala durante la proyección o el tener que pedir la comida desde la app móvil conllevando a una continua aparición de luces desde los teléfonos.
Los usuarios también indican que esto se trata de una "experiencia casual" para el espectador que solo pisa una sala de cine "dos o tres veces al año", calificándolo como una "auténtica pesadilla" para el público asiduo que busca una experiencia diferente a lo que conlleva ver una película en el salón de tu casa. Ante ello, señalan que los cines deberían "cuidar a todo el público y proporcionar mayor variedad de opciones", apostando por introducir mejores opciones económicas como tarifas planas o cuidando en mayor medida la calidad de sus proyecciones y salas. Te dejamos a continuación varios hilos de Twitter recopilando todas las quejas aquí mencionadas.
Yelmo y Cinesa quieren atraer más público a sus cines transformando las salas en salones de casa gigantes. Sillones reclinables, todo tipo de comida e incluso camareros. Quieren mayor comodidad para el espectador, pero la película se convierte en algo secundario. Mal precedente.
? Nowseed (@nowseed) 20 de agosto de 2018
