Mujeres que marcaron un antes y un después en el mundo del cine y la televisión

Alice Guy-Blaché, cineasta francesa, fue la primera persona de la historia en crear un cortometraje de ficción.

Cuando solo tenía 17 años, empezó a formarse en taquigrafía para conseguir un trabajo y mantener a su madre después de la muerte de su padre. Inicialmente trabajaba como secretaria para el director de Gaumont et Cie, una compañía de fotografía. Sin embargo, ahí solo usaban los videos para hacer demostraciones o por motivos científicos, lo que le parecía aburrido.

En 1894, pedió permiso a Gaumont para rodar su propia cinta y creó el cortometraje 'La Fée aux Choux' (El hada de las coles), que hoy es considerado como la primera película narrativa. Durante diez años, entre 1896 y 1906, trabajaría como jefa de producción de Gaumont y continuaría desarrollando ese estilo narrativo. En su momento, fue la única cineasta femenina en el mundo y la primera persona que pudo ganarse la vida gracias al cine.

En 1910 se mudó a los Estados Unidos con su marido y los dos empezaron su propia compañía de producción, The Solax Company, el estudio más grande en el país antes del nacimiento de Hollywood. Su marido dirigía la producción y ella era jefa de dirección artística de la mayoría de los estrenos del estudio.

El papel de Guy en el desarrollo de la industria del cine fue imprescindible; inventó el cine narrativo y fue la primera cineasta femenina. Dirigió más de 1000 películas, aunque pocas han sobrevivido hasta hoy. Durante muchos años, sus obras fueron atribuidas a su marido o cineastas anónimos, pero ahora empieza a recibir el respeto y reconocimiento que merece.

Lois Weber, actriz, guionista, productora y directora durante la época del cine mudo, fue una de las primeras personas en experimentar con sonido y plasmó muchos temas polémicos en la pantalla, como asuntos sociales y humanitarios.

Nació en Pennsylvania y desde pequeña fue una niña prodigio que tocaba el piano y se iba de gira por todo el país. Originalmente fue empleada por Alice Guy-Blaché y su marido para hacer la música en sus películas, pero en 1908 empezó a escribir sus propios guiones. Más adelante, en 1914 se convirtió en la primera mujer norteamericana en dirigir un largometraje, 'The Merchant of Venice'; Y en 1915 escribió y protagonizó 'Hypocrites', cinta con la primera escena que muestra la desnudez de una mujer. Sus películas abordaron temas muy polémicos, como la drogadicción y el alcohol.

Fue una de las directoras más experimentales e influyentes en la época muda del cine en Hollywood, y la primera mujer norteamericana en empezar y dirigir su propio estudio, Lois Weber Productions, en 1917.

Esfir Shub, una de las únicas directoras en la Unión Soviética, fue pionera en el desarrollo de documentales periodísticos.

Shub nació en un pueblo en Ucrania y, durante los años previos a la revolución, estudió literatura en el instituto de educación superior de mujeres en Moscú. Durante sus estudios, se involucró en el teatro soviético y colaboró con el director, Vsevolod Meyerhold, en sus obras. En 1922 empezó a trabajar para Gosinko, el estudio del estado, como editora; y su tarea era censurar películas extranjeras para que encajaran con la ideología soviético.

Hizo su primer propio proyecto en 1927, 'Padenie dinastii Romanovykh' (La caída de la dinastía Romanov), un documental que fue elogiado por ser propaganda gubernamental. Hoy en día, su estilo periodístico es considerado como el origen de la técnica moderna de compilación. Su influencia alcanzó los Estados Unidos durante los años 30 y en 1932 tuvo un papel significativo en el desarrollo del primer documental soviético con sonido.

Fue una directora pionera en la Unión Soviética, y mundialmente una de las cineastas más influyentes por su manera de rodar documentales.

Dorothy Arzner es conocida por ser la primera directora en Hollywood y también por inventar la pértiga, un tipo de micrófono que todavía se usa hoy en día.

Arzner se crío en Los Ángeles, en pleno Hollywood, donde su padre tenía un restaurante al lado de un teatro popular. Aunque durante la infancia estaba sumergida en el mundo de actores y actrices famosos, después de acabar el colegio, inicialmente decidió seguir una carrera como médico. Sin embargo, después de dos años, dejó sus estudios para sumergirse en el mundo del cine.

Empezó a trabajar para Paramount como taquígrafa de guiones, pero pronto logró empezar a trabajar como editora y guionista. Después de bastantes años, decidió que quería ser directora y amenazó a Paramount con marcharse si no le daban una oportunidad. Por lo tanto, en 1927 hizo su primera película, 'La reina de la moda', para dicho estudio y, después de su éxito, le llovieron los proyectos. Arzner es recordada como una de las figuras de Hollywood más importantes para el movimiento feminista, y su obra más aclamada por ello fue 'Baila, muchacha, baila' en 1940, protagonizada por Maureen O'Hara y Lucille Ball.

En total dirigió más de 20 películas y fue la única directora de Hollywood en aquel momento. Así como ser una pionera para mujeres en la industria, fue una de las primeras figuras públicas LGBTQ+; aunque era un escándalo en su momento, Arzner vivió con su pareja, Marion Morgan, bailarina y coreógrafa, hasta su muerte.

Margaret Booth, editora de películas norteamericana, tuvo un importante papel en el desarrollo de la técnica de edición de "cortes invisibles".

Booth empezó su carrera como editora de videos en Hollywood cuando solo tenía 17 años. Trabajaba para Louis B. Mayer cuando era productor independiente y en 1924, cuando el estudio cuando se convirtió en Metro-Goldwyn-Mayer, se convirtió en asistente del director de la compañía. Booth editó cientos de películas durante su vida e incluso fue nominada para un premio de Oscar en 1935, gracias a su trabajo con 'La tragedia de la Bounty'. Otras de sus obras significativas son 'La pareja chiflada', 'Un detective barato' o 'Wise Girls'. Booth, que trabajó como la editora principal de MGM entre 1939 y 1968, fue descrita por Village Voice como "la autoridad última de todas las películas que produjesen los estudios durante 30 años".

Hoy en día es considerada como una de las principales impulsoras de la técnica de "cortes invisibles"; el estilo de edición que apuesta por hacer transiciones sencillas entre los planos para conseguir que los espectadores se centren en la historia y no se den cuenta del cambio.

Charlotte Reiniger, conocida como "Lotte", fue una directora alemana pionera en la creación de animación de siluetas.

Nacida en Berlín, mostró interés por el cine y el arte de titiriteros desde pequeña. En 1915, después de ir a una de las conferencias de Paul Wegener ('El golem'), Reiniger comenzó a trabajar en el mismo teatro que el director, en el que empezó a hacer atrezzos entre bambalinas.

En 1918 animó las ratas de madera para la película de Wegener 'Der Rattenfänger von Hameln' (El flautista de Hamelín), y diseñó intertítulos con siluetas animadas. Con el éxito de este proyecto, consiguió un puesto en el Instituto de Investigaciones Culturales, un estudio experimental de animación; y en 1919 realizó su primer corto de animación con siluetas, 'El ornamento del corazón enamorado'. Al final, llevó a cabo su primer largometraje en 1926, 'Las aventuras del príncipe Achmed', que fue muy popular en su momento.

Con el ascenso del partido nazi al poder, Reiniger y su marido emigraron, pero sin obtener un visado permanente en ningún país, viajaron de un país a otro durante los años de conflicto. Después del fin de la guerra, se mudaron a Londres y ahí Reiniger continuó realizando películas. Tuvo una carrera extensa que avarcó más de 20 películas de animación con siluetas en total.

El estilo de animación de siluetas de Reniger ha sido muy influyente en su campo y todavía se utiliza en películas a día de hoy. Por ejemplo, 'Fantasía' contó con este estilo de animación en muchas escenas, y también inspiró la manera en la que se narra 'La Fábula de los Tres Hermanos' en 'Harry Potter y las reliquias de la muerte: Parte 1'.

Katharine Hepburn, una de las actrices más influyentes durante la época dorada de Hollywood, y rebelde con causa, la feminista, todavía mantiene el récord de Oscars en la categoría de Mejor Actriz (cuatro en total).

Nació en Connecticut y sus padres eran activistas que luchaban por los derechos de las mujeres y el cambio social. Comenzó su carrera como actriz cuando dejó la universidad, buscando papeles en obras del teatro. En 1932 un director de Hollywood vio una de sus actuaciones de teatro y se la llevó a Los Ángeles donde Hepburn empezó una de las carreras de Hollywood más impresionantes, que duró 60 años hasta 1994. Algunas de sus películas más conocidas son 'Mujercitas', 'Gloria de un día', 'Historias de Filadelfia', y 'Adivina quién viene esta noche'.

American Film Institute ha calificado a Hepburn como la "mejor estrella del cine clásico de Hollywood" ya que fue una de las actrices más influyentes de la época. Conocida por su rechazo de la feminidad tradicional, esta atlética, habladora y arrolladora intérprete, se convirtió en la primera mujer en popularizar los pantalones, prenda que, en aquel momento, se consideraba vulgar para las mujeres.

Lucille Ball, actriz, comediante, modelo, fue la primera mujer en dirigir un gran estudio de televisión.

Nació en Nueva York y empezó su carrera como modelo en 1929, antes de encontrar papeles en Broadway y pequeñas películas. En los años 50, protagonizó la popular comedia 'Te quiero, Lucy' con su marido, Desi Arnaz. La serie, muy querida en su momento y ciertamente relevante para la historia televisiva, se vio salpicada por la polémica cuando Ball se quedó embarazada en 1953. Y es que, aunque los guionistas incluyeron un embarazo en la trama sin problemas, la cadena CBS no quiso que una mujer embarazada estuviera en su programa. Después de luchar contra la injusticia, les permitieron hacerlo, pero mencionar la palabra "embarazada" estaba totalmente prohibido. Así Ball se convirtió en una de las primeras mujeres que trabajase en televisión durante su embarazo.

En 1962 también se convirtió en la primera mujer en dirigir una productora de televisión, Desilu Productions, compañía que crease algunos de los programas más conocidos de la época, como 'Star Trek' o 'Misión: imposible'.

Olivia de Havilland, actriz británica que se criase en los Estados Unidos y viviese la mayoría de su vida en Francia, fue una de las actrices más influyentes del siglo XX, impacto que no dudaba en utilizar en su lucha por los derechos de los actores en Hollywood.

Desde pequeña a Havilland le encantaba el teatro, por lo que participó en muchas actuaciones en su instituto, algo su padrastro no aprobaba por lo que terminó echándola de casa cuando aún era una adolescente.

La actriz hizo su debut en 1935 de la mano de 'El sueño de una noche de verano' de Warner Brothers, estudio con el que firmó un contrato de varios años. protagonizó muchos papeles durante los años 30, y cuando la Segunda Guerra Mundial estalló, se volcó en entretener a los soldados recorriendo campamentos y hospitales.

En 1943 Warner Brothers intentó añadir seis meses más en su contrato sin su permiso, algo que los estudios podían hacer legalmente en aquel momento. Havilland presentó una demanda contra la compañía y la ganó, lo que supuso un punto de inflexión en la manera de establecer contratos que terminó por garantizar los derechos de los actores.

Kathryn Bigelow, directora, productora y guionista norteamericana; fue la primera mujer en ganar un Oscar en la categoría de Mejor Dirección.

Inicialmente, Bigelow estudió para ser artista en San Francisco y se licenció en Bellas Artes para terminar haciendo un Máster en teoría y crítica en la Columbia University.

Allí Bigelow desarrolló su interés por la industria del cine y empezó a dirigir cortometrajes. Hizo su primera película en 1981 con Monty Montgomery, 'The Loveless', cinta protagonizada por Willem Dafoe en su primer papel protagonista. Durante los próximos años Bigelow se volvería más prolífica, hasta que su película 'Le llaman Bodhi', en 1991, popularizase su nombre entre los cinéfilos. En 2008 Bigelow se convirtió en la primera mujer de la historia en recibir un premio Oscar en la categoría de Mejor Dirección por 'En tierra hostil', película que también produjo.

Bigelow no ha dejado de subrayar la falta de directoras en Hollywood y ha luchado contra la distinción de género entre los directores; de hecho en declaraciones a Tech Online, aseguró: "no es relevante quién dirige una película, lo importante es si la película provoca o no una reacción".

Oprah Winfrey, presentadora de televisión y radio, actriz y productora, es, culturalmente hablando, una de las mujeres más importantes actualmente, y una pionera para las mujeres negras en Hollywood.

Nació en un humilde pueblo rural de Mississippi y pasó su infancia entre las casas de su madre y de su abuela. Finalmente se mudó a Nashville a vivir con su padre. Y fue allí en Tennessee donde empezase a trabajar para la emisora de radio local afroamericana, WVOL, en la que descubrió su amor por los medios de comunicación.

Winfrey se convirtió en la presentadora del telediario más joven de WLAC-TV en Nashville, y la primera mujer negra en hacerlo. Después de trabajar como presentadora de las noticias durante bastantes años, empezó a centrarse en las entrevistas e hizo que programas poco conocidos llegasen a ser muy populares. Pronto le dieron su propio programa en 1986, 'The Oprah Winfrey Show'.

Winfrey revolucionó el estilo de conducir este tipo de propuestas televisivas cuando empezase a hablar de temas más variados como asuntos sociales, religiosos o políticos. Sobresalió en un campo dominado por hombres blancos y su programa llegó a ser el más popular (de su género) de todos los tiempos. Fue la primera multimillonaria de los Estados Unidos, y se ha convertido en la afroamericana más rica del siglo 20.

Ellen Lee DeGeneres , comediante, presentadora de televisión, actriz, escritora, productora y activista LGBTQ+, es una de las figuras más importantes del mundo cultural y ha contribuido mucho a la lucha por la representación de las mujeres lesbianas en los medios de comunicación.

Nació y se crió en Louisiana y empezó su carrera como comediante de stand-up en bares y cafés. Pronto comenzó a aparecer en la televisión, y empezó su propia serie de comedia en 1994, 'Ellen'. Después dio el salto al cine con 'Buscando a Nemo'.

En 1997 DeGeneres salió del armario y la cobertura en los medios fue invasora, brutal y no dejó de poner trabas a su carrera. Sin embargo esta presentadora, en lugar de dejarse llevar por el odio, se centró en ser una pionera activista de los derechos y la representación del colectivo LGBTQ+; lucha que no ha dejado de librar desde su famoso programa de entrevistas, 'The Ellen DeGeneres Show', que desde que arrancase en 2003 no ha dejado de crecer en popularidad.

DeGeneres ha sido una figura imprescindible en la representación y exposición de las mujeres lesbianas, incluso durante una época en la que no fue bien recibida, así recibió la Presidential Medal of Freedom en 2016 por su activismo y contribución a la cultura popular.

Alison Bechdel, feminista, artista, autora y activista LGBTQ+, es conocida por haber creado el test Bechdel, que analiza la representación de mujeres en ficción.

Nació en Pennsylvania y se crío en una familia conservadora católica. Salió del armario como lesbiana cuando tenía 19 años mientras estaba estudiando literatura e historia en la universidad. Ha escrito varias novelas de cómics, como 'Fun Home' y 'Dykes to Watch Out For', que exploran el concepto de género y sexualidad, y la manera en la que se representan en los medios de comunicación.

Aunque no trabaja dentro de la industria, su contribución al mundo del cine ha sido crucial gracias a la creación del mencionado test Bechdel, que analiza la manera en la que las mujeres son representadas en la pantalla. Bechdel expone las normas de esta prueba en su cómic 'Dykes to Watch Out For', en el que afirma que para pasar el test, una película o historia necesita 1. tener al menos de dos mujeres, 2. que hablen entre sí, y 3. cuya conversación se centre en algo que no sea un hombre.

El uso de su prueba para analizar el cine contemporáneo ha sido imprescindible a la hora de resaltar la falta de representación femenina en el mundo cultural, y es que tristemente muy pocas películas aprueban, incluso en el cine actual.