El 13 de mayo arrancaba la 78 edición del Festival de cine de Cannes y lo hacía con un homenaje a una de las figuras más legendarias de nuestro cine actual: Robert De Niro recibió la Palma de Oro honorífica de la mano de Leonardo DiCaprio, con el que ha trabajado en 'Los asesinos de la luna' y 'Vida de este chico'.
En su discurso, De Niro se postuló firmemente en contra de las políticas del actual presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, al que llamó "filisteo" (persona cerrada a la innovación artística y cultural) y enemigo de las artes:
"En mi país, luchamos con uñas y dientes por la democracia que antes dábamos por sentada. Y eso nos afecta a todos los que estamos aquí, porque el arte es democrático. El arte es inclusivo y une a la gente, como esta noche. El arte busca la verdad, abraza la diversidad, y por eso el arte es una amenaza, por eso nosotros somos una amenaza para los autócratas y los fascistas.El presidente filisteo de Estados Unidos se ha hecho nombrar director de una de nuestras principales instituciones culturales [el Centro Kennedy]. Ha recortado la financiación y el apoyo a las artes, las humanidades y la educación. Y ahora ha anunciado un arancel del 100 % a las películas producidas fuera de Estados Unidos. Piénsenlo bien. No se puede poner precio a la creatividad, pero aparentemente sí se le puede imponer un arancel. Por supuesto, esto es inaceptable. Todos estos ataques son inaceptables. Y este no es solo un problema estadounidense, es mundial. Como en una película, no podemos quedarnos de brazos cruzados. Tenemos que actuar, y tenemos que actuar ya".
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De Niro continuó señalando que la gente debería actuar "sin violencia, pero con gran pasión y determinación" y concluyó reclamando el lema de la Revolución francesa contra el dirigente de su país: "Es hora de que todos los que se preocupan por la libertad se organicen, protesten y, cuando haya elecciones, voten. Voten. Esta noche, y durante los próximos 11 días, demostramos nuestra fuerza y compromiso celebrando el arte en este glorioso festival. Libertad, igualdad, fraternidad".

Volviendo a DiCaprio, el actor aseguró que era un gran honor rendir homenaje al hombre al que, antes de convertirse él en actor, estudió "intentando comprender cómo se sumergía tan completamente en sus personajes. Él creó el modelo", dijo de De Niro, "No era solo otro gran actor, era el actor", y lo nombró "el hombre que enseñó a casi todos los actores a cómo hablar consigo mismos mientras se miran al espejo":
"Si conocen a Bob, y creo que muchos de ustedes en esta sala lo conocen, saben que no es alguien que disfrute especialmente de ser el centro de atención fuera de cámara. Si tengo suerte, esta noche me hará un guiño, quizás incluso una media sonrisa. Y lo tomaré como una ovación de pie. Pero de vez en cuando, incluso los gigantes más reservados merecen su momento, un momento para ser reconocidos, no solo por su trabajo, sino por la influencia silenciosa y duradera que han tenido en tantas vidas, en mi vida", dijo DiCaprio, que, por suerte, recibió hasta un abrazo de De Niro.

De Niro no fue el único que dio un discurso apasionado esa noche, el actor Laurent Lafitte, presentador de la ceremonia, regresaba al escenario del teatro Grand Lumiére para hablar sobre el papel de los actores y actrices en la transformación del cine y el impacto que pueden tener cuando utilizan su plataforma para generar cambios: "Para un actor, alzar la voz es a menudo una forma de autosacrificio". Lafitte también criticó a Trump al afirmar que temas como el cambio climático, la equidad, el racismo, la inmigración o los derechos de los homosexuales no se pueden discutir al estar siendo "prohibidos por la administración" de la última superpotencia del mundo.
"Fátima debería estar aquí"
Esta edición del Festival de Cannes tiene a Juliette Binoche de Presidenta del Jurado en competición oficial, un jurado que completan Halle Berry, Dieudo Hamadi, Payal Kapadia, Carlos Reygadas, Alba Rohrwacher, Hong Sang-soo, Leïla Slimani y Jeremy Strong.
Binoche también tomó la palabra en la ceremonia para denunciar la guerra, el cambio climático o la misoginia, aunque en la rueda de prensa previa había evitado responder preguntas sobre el genocidio en Palestina: "Los artistas tienen la oportunidad de dar testimonio de los demás. Cuanto mayor sea el nivel de sufrimiento, más vital se vuelve su participación", dijo sobre el escenario, para luego hablar de "los rehenes del 7 de octubre".
También tuvo a bien mencionar a la fotoperiodista Fátima Hassouna, asesinada en Gaza junto a 10 de sus familiares. Hassona aparece en el documental de Sepideh Farsi 'Put Your Soul on Your Hand and Walk' que se proyectará estos días en Cannes y que retrata el conflicto palestino a través de videollamadas de la directora con la periodista. "Fátima debería haber estado con nosotros esta noche", dijo escuetamente Binoche. Festival de cine de Cannes concluye el 24 de mayo.