El espacio al son de la música clásica

La obra cumbre de la ciencia ficción, la obra que lo cambió todo, el clásico entre los clásicos del género.

Posee una banda sonora espectacular, que da los golpes sonoros cuando son necesarios haciendo que los alunizajes de las naves parezcan danzas, donde la nave se mueve al son de "El danubio azul", dejando de ser ciencia para convertirse en magia. La película cuenta con poco diálogo, tampoco lo necesita, ya que las escenas donde la música es lo principal quedarán para el recuerdo, junto con aquellas que tienen la respiración del protagonista como único sonido.

Además cuenta con una de las máquinas más carismáticas jamás creadas, Hal 900, personaje que ya forma parte de la memoria popular.

Para la época en la que fue filmada cuenta con unos efectos especiales maravillosos, llegando a su punto fuerte en el juego de luces y colores hacia el final de la película.

Es una película que por muchas suposiciones que se hagan nunca se llegará a comprender del todo su contenido, debido a la forma en la que está narrada y a las pocas explicaciones que se dan sobre lo que ocurre. Pero ésto que lo que hace que la película sea todavía más especial.

Una de esas películas que hay que ver antes de morir.