'Animales sin collar' es una obra depurada y elegante en el trazo, apuesta por la contención formal, pero resulta demasiado tímida a la hora de manifestar las turbulencias internas que la recorren y algo desvaída a la hora de generar tensión.
La película se erige, así, en un melodrama sobre el retorno de lo reprimido que habilita en el territorio de lo íntimo un espacio para los pactos de olvido en nombre del pragmatismo
Es un thriller político ajustado aunque de tensión discontinua con una sumisa Nora paulatinamente emponderada (a pesar de todo, Ibsen no ha envejecido tanto), aunque al guión le sobre algún personaje y ciertas previsibles resoluciones.