Conmovedora y dulce

Catfish es una filme del 2010. Nacida en Sundace y muy bien recibida por la crítica, llamó mi atención hace un par de semanas cuando escuché hablar de ella en un café mientras almorzaba. Una joya del cine independiente y con orígenes en uno de mis festivales de cine favoritos, no podía dejar pasar la oportunidad de darle un vistazo. Sus raíces independientes se muestran en el bajo presupuesto, pero es sin duda alguna un filme entretenido.Catfish es un pseudo-documental que filma el hermano y un compañero de piso del protagonista acerca de la relación de Nev, un fotógrafo neoyorkino, con Abby, una pequeña pintora de Michigan que usó una de sus fotografías publicadas como inspiración. Nev comienza a mandarle fotos para que ella las pinte y las compra. La mayoría del contacto que hay es con su madre, Angela. Por medio de Facebook, Nev comienza a conocer a la familia de Abby, a su padre, a su hermano y sobre todo a su hermana mayor Megan. Megan es una bailarina y artista extremadamente atractiva quien empieza a coquetear con Nev; le manda mensajes, le escribe canciones con ayuda de su hermano (quien tiene una banda musical) y le dibuja. Con el tiempo, Nev y Megan comienzan a tener una relación a distancia, con todo lo que ello conlleva. Con el tiempo algunas dudas comienzan a surgir, y es Nev quien tiene que darse cuenta de ciertas irregularidades que hay con Megan y su familia.Es terrible tener que terminar ahí, ya que Catfish requiere de un análisis a profundidad. Es un filme que sabe de lo que quiere hablar y en qué se quiere convertir. Las inspiraciones expresadas a través del metraje son muy claras y aunque tal vez no cuente con detalles técnicos impresionantes como otros filmes sobre los que he dado mis dos centavos, el mensaje ha sido claro y conciso. Antes de verla tenía miedo de que se a la mitad de la película se convirtiera en algo que no quería ser, y lo hizo. Pero lo hizo de tal manera que no pude hacer mas que disfrutarlo. Fue una conversión predecible, pero hecha de una manera extremadamente elegante.Lo último que puedo decir: No importa si piensas que es un documental falso o verdadero, Catfish es verdaderamente una historia moderna que tienes que disfrutar. Sobre todo si te gustan los documentales o el cine independiente. Una historia extrañamente conmovedora y dulce.