Kong, rey de los blockbusters

Es un prodigio técnico: la fotografía, los efectos visuales, la música... Tiene una dirección maravillosa: hay planos que son arte puro. La presentación de cada nuevo bicho es memorable, a recordar la de la araña, especialmente grotesca y cargada de vísceras; en ese sentido, me ha dado todo lo que no me dio Jurassic World. Sin embargo, si una secuencia quedará para el recuerdo será la de los helicópteros, BRU-TAL, desde esa entrada en la tormenta hasta ese plano secuencia desde dentro del helicóptero. Brava.

Creo que, en ocasiones, es intencionadamente "mala" (no sé si ponerlo como contra porque te hace disfrutarla igual) y puede sacarte de la película. Por poner alguna pega más, Tom Hiddleston hace, probablemente, su peor interpretación: sólo pasaba por allí con el ceño fruncido; menos mal que tenemos a un desatado Samuel L. Jackson para salvar la función. Cómo se nota en cada escena que se lo está pasando bomba. Se confirma como uno de los mejores secundarios del cine actual (memorable su personaje en 'Django').

'Kong' podría haber sido la típica película de monstruos pero ha conseguido crearse una divertida identidad propia que la hace única, en su tono y, sobre todo, en su calidad visual. Nunca antes el gran simio había parecido tan real.