EPISODES

Matt LeBlanc llevaba varios años desaparecido desde que finalizó el spin-off centrado en su personaje de Friends (Joey). Pero gracias a esta gran serie volvimos a disfrutar de él en plena forma. Leblanc volvió a formar equipo con David Crane, el co-creador de la serie de los amigos del Central Perk, y consiguieron crear esta fantástica serie que sin hacer ruido se convirtió en una de las mejores comedias (sino la mejor) del panorama televisivo.

En ella, Leblanc interpreta una versión mujeriega y egoísta de sí mismo, es decir, un actor famoso de los noventa que intenta conseguir el éxito de antaño. En su camino se cruzan dos guionistas británicos que tendrán que soportar el circo que es la industria de Hollywood y los caprichos de una estrella como Leblanc.

Esta serie tiene de todo, parece una sitcom en algunas escenas, pero en cuanto cambian de plano o pasan a otra escena nos damos cuenta de que estamos en una comedia de media hora, con diferentes escenarios en cada capítulo y donde algunas secuencias se convierten en ejercicios audiovisuales más propios de la cinematografía. Episodes rebosa calidad actoral por cada costado, pero lo que más hace brillar a esta serie son los geniales guiones que hacen avanzar la trama.