'Waz' fue de las películas presentadas en la pasada edición del Festival de Sitges. Coproducción entre el Reino Unido y Estados Unidos la película ha sido dirigida por Tom Shankland e interpretada por Stellan Skarsgard, Melissa George, Selma Blair, Ashley Walters y John Sharian entre otros, y llegará a nuestras salas el próximo 29 de febrero.
'Waz', cuyo verdadero título sería 'w-delta-z', inicio de la ecuación Price, reproduce una fórmula que un asesino en serie ha decidido desmentir con un juego macabro que pone a sus víctimas entre la espada y la pared: o mueren con mucho sufrimiento o terminan con la vida de un ser querido. Los encargados de intentar resolver estos terribles crímenes serán una pareja de policías, Eddie Argo y Helen O'Mara. Eddie Argo es un veterano detective desgastado ya por los años de implicación en asuntos de brutalidad pandillera. A pesar de guiarse siempre por las reglas su integridad profesional empieza a menguar cuando él y su inexperimentada compañera Helen O'Mara se ven envueltos en este caso de horribles y violentos crímenes que tienen como víctimas una reconocida banda organizada local. Esto le hace al detective revisitar un caso concreto del pasado que hubiera preferido olvidar...
Un pouporrí interesante
Inevitablemente, cuando uno ve 'Waz' no puede dejar de pensar en 'Saw', pues las similitudes -al menos superficialmente- son más que obvias, y sus influencias bastante patentes, pero a pesar de ello la película de Tom Shankland contiene las suficientes dosis de originalidad como para desvincularse de la alargada sombra de la película de James Wan. Una de sus mayores diferencias radica en que, en 'Waz', la investigación ocupa la mayor parte del metraje en detrimento de la violencia, y en segundo lugar -y con ello no pretendo decir que sea mejor o peor- resulta bastante más consistente argumentalmente.
Por desgracia, dicha consistencia se convierte en tedio en el grueso central del metraje, en el que su lentitud puede acabar con la paciencia de más de uno a pesar del buen comienzo de la película, jugando siempre con la cámara al hombro y los planos cercanos, aunque sin llegar ni a agobiar ni a marear a causa de su abuso. Como decía, 'Waz' centra sus cien minutos de metraje tanto en la investigación de los asesinatos como en la vida personal del detective Eddie Argo, en una exploración interior que nos sumerge en oscuros callejones y barrios suburbiales -que a un servidor le han recordado muchísimo a la escenografía de 'El cuervo'- en una opresiva ambientación bastante elaborada aunque quizá excesivamente oscura.
Por otro lado, y sin pretender desvelar nada al respecto, la trama de 'Waz' se antoja como un poupurri entre 'Se7en' y las anteriormente citadas 'Saw' y 'El cuervo', con un desenlace final que horrorizará a algunos y encandilará a otros, pero que sin duda no dejará indiferente.
