å

CRÍTICA

'Cuando dejes de quererme': La tierra tiene historia, aparte de huesos

Un thriller con un asesinato a resolver que va perdiendo fuelle pero con un Eneko Sagardoy a la altura y su protagonista, Flor Torrente, dando el callo.

Por Sandra Sánchez Guerra 16 de Febrero 2018 | 10:02

Comparte:

¡Comenta!

'Cuando dejes de quererme' habla sobre las heridas abiertas y las raíces, sobre esa necesidad de conocer que late en el fondo de nuestro ser y busca alcanzar el saber que nos han negado. Este es el viaje introspectivo que emprende Laura (Flor Torrente), la protagonista de la primera película que dirige el guionista Cuando dejes de quererme. La actriz interpreta a una joven argentina que regresa a su pueblo de origen, Durango, País Vasco, para despedirse de su padre biológico tras descubrir que Félix (Cuando dejes de quererme) no la abandonó cuando era pequeña sino que fue asesinado.

Junto al único padre que ha conocido, Fredo (Eduardo Blanco), y un agente de seguros interpretado por Miki Esparbé, Laura comenzará a investigar por qué mataron a su padre y quién lo hizo, destapando así varios secretos familiares que llevaban décadas enterrados. 'Cuando dejes de quererme' se remonta, a raíz de un evento actual que vive el personaje femenino protagonista y a través de flashbacks, a esa investigación que rebusca en las profundidades de una época turbia de nuestra Historia: los años 60, con la represión franquista y ETA.

 'Cuando dejes de quererme'

Este contexto que plantea la película es lo que más genera curiosidad y hace que te acerques a la historia con una mayor implicación, intrigado por la oscuridad histórica que pone a Félix en un aprieto y asienta los cimientos del conflicto. No obstante, esta suciedad política es la puerta de entrada a un enigma que da muchas más vueltas. Al hilo de quién hizo desaparecer el cuerpo de Félix Careaga, cabe decir que, aunque el desarrollo que la película plantea en torno a la investigación está bien pautadi, los pasos para descubrir la verdad al final terminan por cansar al espectador.

Esta sensación parte del hecho de que 'Cuando dejes de quererme' tiene un problema con los tonos que intenta encajar en la trama. Fredo es un personaje que hace bromas en los peores momentos y su línea de humor, para desengrasar la historia, busca causar tensión de forma premeditada en algunos puntos de la película. Sin embargo, esta forma de blanquear un trance dramático con humor a presión desequilibra el valor como thriller de la cinta y le resta naturalidad y veracidad. En varias ocasiones, se ve un empeño del chiste por el chiste, forzado, que no sirve igual en la gran pantalla que en el papel.

 'Cuando dejes de quererme'

Un thriller que se consume

Flor Torrente, la actriz encargada de dar vida a la protagonista femenina, lleva bien la carga emotiva de volver al pasado. De todas formas, la película también incurre en reivindicar lo profundos que son los sentimientos que se ponen de manifiesto, de manera que, a veces, hay una intensidad que sobra. Lo que se echa de menos es un desarrollo mayor de los personajes principales a los que vemos investigando, ya que en algún momento se quedan cojos.

Lo más disfrutable de la película, que va decayendo un poco en su final, son sin duda los flashbacks que protagoniza Eneko Sagardoy, que demuestra de nuevo tener una gran capacidad interpretativa para cargar con el peso emocional del conflicto a sus espaldas. A ello hay que sumarle la espléndida participación de Antonio Dechent.

Nota: 6

Lo mejor: La oscuridad histórica que se plantea dado el momento y la protagonista más Eneko Sagardoy.

Lo peor: Que su humor rechine en ocasiones y que se vaya perdiendo el interés por seguir los pasos a este thriller.