å

CRÍTICA

'Pequeño país': El año en el que la guerra robó la inocencia

Crítica de 'Pequeño país', dirigida y escrita por Éric Barbier. Basada en la novela homónima de Gaël Faye. Protagonizada por Jean-Paul Rouve y Djibril Vancoppenolle. Nominada a un César.

Miguel Ángel Pizarro
Por Miguel Ángel Pizarro Más 21 de Mayo 2021 | 09:00
Colaborador de eCartelera. Apasionado del cine y la cultura en general. Cine europeo y de animación, mi especialidad.

Comparte:

¡Comenta!

Éric Barbier sigue ahondando en historias bélicas. Tras realizar la estupenda 'Promesa al amanecer', ahora el cineasta pasa de la Segunda Guerra Mundial a la guerra entre tutsis y hutus que hubo en Burundi en 1993, conflicto que quedó ensombrecido por la misma guerra étnica que hubo un año después en Ruanda. Barbier dirige 'Pequeño país', adaptación de la novela autobiográfica del rapero francés Gaël Faye, que huyó del país africano con tan solo 13 años.

Pequeño país

Barbier toma ejemplo de la directora alemana Caroline Link y su adaptación de la novela 'Cuando Hitler robó el conejo rosa', titulada en España como 'El año que dejamos de jugar', al narrar toda la historia desde la perspectiva de su joven protagonista, llamado Gabriel, interpretado de manera espontánea y natural por Djibril Vancoppenolle. Llama la atención cómo su mirada se transforma, mostrando la pérdida de la inocencia por la guerra y cómo la infancia es capaz de ver de manera prístina el sinsentido de los conflictos bélicos y cómo ellos tienen que pagar el deseo de exterminio, dominación y sumisión de los adultos.

Y es esa mirada lo que realza al filme. Gracias a estar sujeto a esta perspectiva, Barbier configura toda una película en la que la guerra comienza siendo algo que se nombra, prosigue como algo que se siente y termina por verse. Y es esa manera en la que Barbier lo plasma lo que hace que 'Pequeño país' destaque.

Pequeño país

Una película con una mirada personal concreta

Además, otro elemento que destaca en 'Pequeño país' es que se percibe esa mirada personal de la novela de Faye. Su realidad fue distinta, al ser mestizo, mitad francés mitad ruandés de etnia tutsi. Esa diferencia se refleja en la cinta, especialmente a la hora de que ese factor se convierta en fundamental para huir. Ahí se ve también esa desigualdad en quién podía escapar y quién no.

Puede ser que la mirada dentro de la infancia aleje a 'Pequeño país' de propuestas más serios y duras como 'Cafarnaúm', 'El pan de la guerra' o 'Timbuktu'; pero 'Pequeño país' es buen acercamiento al conflicto entre tutsis y hutus en Burundi en los 90. Un acercamiento pedagógico.

Nota: 7

Lo mejor: La manera en la que Barbier muestra la pérdida de la inocencia en una guerra.

Lo peor: No apta para aquellos que busquen un drama bélico más solemne.

Películas