å

CRÍTICA

'Retornados': El miedo al diferente

Con un guión muy bien atado se presenta esta nueva producción que rompe moldes con el fenómeno de los muertos vivientes. En cines el 15 de noviembre.

Por Carlos Manuel Hernández Fernández 14 de Noviembre 2013 | 10:00

Comparte:

Ver comentarios (1)

Quizás en un futuro próximo, la siguiente moda cinematográfica sea el espacio exterior, pero en estos momentos no hay una tendencia que haya saturado tanto la cultura pop como la fiebre por los muertos vivientes. Es por ello que al encontrarme ante una nueva propuesta como es la de 'Retornados', rápidamente crecen en mí el miedo de que, posiblemente, vaya a presenciar otra masacre zombie de turno, pero en esta ocasión, me equivoco. Ésta producción española con actores y localizaciones internacionales rompe con la propuesta usada hasta la saciedad por el momento, y es por ello que nos encontramos ante un drama con toques de thriller que lo que es más importante y sutil: no se trata de una película de zombies, sino una película con zombies, con una historia que busca acercarse más a la situación al pie de la calle, con personas normales, que intentar encontrar la salvación del mundo con un atractivo héroe.

'Retornados': El miedo al diferente

La propuesta de 'Retornados' reza en su sinopsis oficial: "La humanidad convive con los 'Retornados', gente de apariencia normal que ha sido infectada por un virus devastador. Sólo la inyección diaria de una Proteína evita que se transformen en zombis. Kate trabaja en una unidad de investigación intentando encontrar urgentemente una vacuna definitiva que impida que la epidemia se expanda. Además, oculta una poderosa razón: su pareja, Álex, es un "retornado". El caos se desata cuando el Gobierno anuncia la escasez de la Proteína y la paralización de las investigaciones, obligando a todos los infectados a ingresar en un centro militar de alta seguridad. Temiendo lo peor, Kate y Álex deciden no acatar las órdenes y huir. Su cuenta atrás por la supervivencia ha comenzado".

La historia pues, no nos llevará a salvar el mundo, sino más bien, será una aventura más íntima, centrada en unos pocos personajes, y su lucha por mantenerse a flote en una civilización que ha encontrado una nueva forma de discriminación, un tema que está muy presente en el filme, además de otros enfoques que esconde el metraje, desde el egoísmo hasta el miedo al diferente. Todo ello con el atractivo de no tratar el tema zombie desde la destrucción de la raza humana o algo por el estilo, sino más bien, de cómo la sociedad aprendería a vivir con una plaga que, de momento, puede ser contenida a base de inyecciones diarias a los infectados.

En esta producción, la figura de la mujer es la más fuerte en la historia, y ello queda sintetizado en el papel de Emily Hampshire. La actriz llevará la voz cantante en todo el metraje, convirtiéndose en una verdadera heroína capaz de hacer cualquier cosa para salvar la vida de su esposo, lo cual provocará que algunos de sus actos, sean moralmente reprochables. Es en estos casos en los que el papel de la actriz gana en profundidad, además de que su trabajo en pantalla es bastante correcto, tanto en los momentos de más tensión como emoción, la actriz se muestra bastante suelta, sin llegar a desentonar en las escenas, aunque eso sí, habrá algún momento en la que la veamos un poco 'plana' expresivamente, aunque no es una tónica que la acompañe en todo el metraje. Sin duda, su personaje es de los más cuidados de la historia, con muchos flecos sueltos en su personalidad que le dan esa veracidad de encontrarnos ante una persona normal, en una situación extrema.

'Retornados': El miedo al diferente

El protagonismo masculino ha recaído en Kris Holden-Ried, con el papel de marido de la protagonista, y 'retornado' a su vez. El rol de Holden-Ried cuenta por lo tanto con la urgencia constante de tener que inyectarse la proteína que le mantiene como un ser humano 'normal', y tiene pequeños e interesantes detalles de tensión cuándo alguien habla del tema, además de mantenerse siempre con cierto halo de soledad y, en parte, cierto miedo a que sepan de su situación, lo cual hace que el actor se muestre en pantalla siempre ocupado, con algo rondando por su cabeza, lo cual le ha servido y mucho para mostrar presencia en pantalla, y con ello, cierto carisma y simpatía con quien le ve, ya que muestra que en casi todas las escenas tiene algo que aportar, y su actuación no flaquea aún en los momentos de más tensión. Sin duda, una buen trabajo de este intérprete al que le hubiera sido muy fácil caer en la desesperación barata, y en cambio, ofrece un rol bastante sólido.

Shawn Doyle y la española Claudia Bassols completan el reparto secundario principal, con sus aciertos y desaciertos. Por una parte, el papel de Doyle muestra muchas virtudes en cuanto a temas de amistad y de saber llevar todos los acontecimientos con un halo de naturalidad y consecuencia muy logrados, haciendo que, pese a ser un secundario, su trabajo esté a un gran nivel y llegue a causar una simpatía en el espectador muy cercana a la que sentiría el protagonista de la historia, algo muy importante en el argumento del filme. Por otro lado, el tratamiento que Bassols ha hecho a su personaje, no ha sido muy profundizado, por lo que vemos que su rol está en muchas ocasiones algo artificial, superfluo, que no llega a conectar con el resto del reparto. Esto toma especial importancia cuando hay conversaciones entre los cuatro protagonistas, y podemos ver que Bassols se muestra demasiado obvia o demasiado contemplativa, en definitiva, que hay momentos en los que no parece conectar con el resto de actores, lo cual es una pena, ya que su personaje femenino tiene también un gran peso de poderío y presencia, que en ocasiones, se le queda algo grande a la actriz.

La dirección ha caído en manos de Manuel Carballo, el cual ha sabido cuidar la manera de enfocar la trama para ofrecer una mirada más íntima de la historia, usando algunos recursos fílmicos de manera muy acertada. Es por ello que no nos limitaremos a ver una realización simplemente correcta, y en esta ocasión, Carballo ha sabido ofrecer tensión con algún que otro plano secuencia, además de su sutileza para mostrar la violencia y la tensión, sorprendiendo incluso en alguna que otra escena de acción. Si a ello le sumamos un buen tratamiento del lenguaje del filme, con algunas escenas con una gran fotografía y bien medidas, encontramos que el trabajo del director en este filme ha tenido su mimo, y aunque en ciertas partes parece que las secuencias han sido resueltas de un modo algo rápido, en general es un buen trabajo de dirección.

'Retornados': El miedo al diferente

Todo está atado

El punto más favorable de la película, sin lugar a dudas, es su guión de Hatem Khraiche, el cual se muestra asombrosamente sólido y cargado de intriga. Con una historia que en su sinopsis puede tener su atractivo, pero que siempre queda la duda del saber hasta donde puede llegar, Khraiche ha ideado una trama en la que todo parece conectar, y las acciones de los protagonistas en ciertas partes del filme, pueden volver en consecuencias más tarde, lo cual hace que el espectador esté aún más atento a las acciones de los protagonistas, ya que todo puede tener un porqué más adelante. Con algún que otro giro en su argumento, el libreto en su mayoría está cargado de situaciones interesantes y ambiciosas, dejándonos con un buen sabor de boca en más de una situación, y sobre todo, manteniendo una lógica en sus personajes y diálogos que hacen que todo tenga un especial atractivo. Aún con todo ello, sí es cierto que hay algunos flecos del argumento que no acaban de atarse, y en ocasiones, algunos de los giros de guión pierden el efecto shock al ser tratados con demasiada calma.

Lo más importante del largometraje es el tratamiento que le ha dado al efecto zombie, y como hemos comentado al comienzo, no nos encontramos con una película de zombies, sino una película CON zombies. Esto provoca que sí, los infectados están ahí, se sabe de ellos en la trama, pero no son la pieza angular del argumento, sino que más bien la historia gira con temas más profundos, como el egoísmo, la amistad, la desesperación, y sobre todo, el miedo al diferente. Y es que la discriminación es en realidad la piedra angular de la trama, donde vemos que la sociedad puede lidiar con una epidemia zombie, pero que siempre hay algo en nosotros que nos hace desconfiar de que no es igual, de temer al extraño.

En definitiva, 'Retornados' ofrece una vuelta de tuerca al género zombie, con una historia más íntima de lo que sería una epidemia de estas características, y que sabe tocar temas más allá del mero patriotismo o heroísmo, en una cinta que busca enseñar el lado más humano de este género, el cual ya empieza a ser bastante repetitivo y convencional, por lo que filmes como 'Retornados' son una grata sorpresa para aquél que se ha cansado de apocalipsis de muertos vivientes. Y que no nos engañe el póster, ya que no nos encontramos con un filme de terror, sino un drama en el que los protagonistas solo quieren salvarse a si mismos, con el egoísmo que ello implica, la esperanza y sobre todo, la supervivencia cueste lo que cueste.