A finales de junio se estima que la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas reparta nuevas invitaciones a candidatos que cumplan con los requisitos necesarios. Una noticia que se está siguiendo especialmente de cerca este año, ya que los propietarios de cines están atentos para ver si se les permitirá votar en próximas ediciones o no.
Hasta el momento, las personas que podían votar eran profesionales enfocados en áreas más creativas. Directores, guionistas, productores, actores... ya cuentan con ese derecho, aunque en los últimos tiempos han aumentado las voces procedentes del sector de exhibición que reclaman su espacio en las votaciones.
Compuesta por 19 ramas, la Academia está celebrando reuniones en sus comités para decidir sobre las recomendaciones que están recibiendo de cara a 2028, cuando se celebrará la ceremonia número 100. Según apunta Variety, hay un empujón considerable para que los propietarios de salas puedan tener voz en la toma de decisiones.
"Los Oscar tienen un nuevo requisito para que los votantes vean todas las películas, ¿no? Entonces, ¿por qué no incluir al grupo del que sabes al 100 % que lo ha visto todo?", ha compartido uno de los propietarios. "Vigilamos todo... Es un obvio".
La Academia ha remarcado en numerosas ocasiones que una fuerte estructura de salas es vital y necesaria para la salud y el futuro de la industria. Incluir a los propietarios de salas en las votaciones podría ser un paso lógico y natural, fortaleciendo así la credibilidad de la Academia y garantizando que los más cinéfilos estén más cerca del proceso.
¿Un organigrama cerrado?
La Academia se ha mostrado abierta a cambios en los últimos tiempos. En 2026 se inaugurará una nueva categoría dedicada a los trabajos de casting, y en 2028 se espera la llegada de más novedades, como la de incluir una categoría para los especialistas de acción. Por eso, no sería una idea disparatada que se contemple también la posibilidad de que los propietarios de cines puedan votar.
