La violencia, el sexo explícito y las críticas sobre una representación de la mujer misógina no impidieron que el cruce de piernas de Sharon Stone y por ende la película 'Instinto básico' se convirtiesen en uno de los grandes iconos de los 90. La cinta, dirigida por Paul Verhoeven, contaba con el guión de Joe Eszterhas, quien está trabajando para hacer un remake de la misma.
Según informa The Wrap, quien tuvo acceso a declaraciones del veterano escritor estadounidense, Eszterhas ha cerrado un trato de 4 millones de dólares para volver a redactar el mismo tratado que dio pie a la original, esta vez para Amazon MGM Studios.
En palabras del guionista: "Para quienes se preguntan qué hace un hombre de 80 años escribiendo un thriller erótico y sensual: los rumores sobre mi impotencia cinematográfica son exagerados y discriminan por edad", adelantándose a las posibles críticas de este nuevo proyecto, a lo que añadía:
"Llamo a mi compañero de escritura el Hombrecito Retorcido y vive en lo más profundo de mí. Nació con 29 años y morirá con 29 y me dice que está en las alturas para escribir esta obra y ofrecer a los espectadores un viaje salvaje y orgásmico. Eso me hace muy feliz".

Según algunos informantes conocedores del trato, la película tendrá un tono "anti-woke", una tendencia de la vieja guardia de Hollywood que pretende actuar en consecuencia al supuesto progresismo de Hollywood, al que han acusado en estos últimos años por adaptar iconos del cine animada y de acción real al nuevo siglo y a las nuevas exigencias que eso conlleva.
Las informaciones no terminan ahí y es que la que quedó en el imaginario de las futuras femme fatales en el cine, Sharon Stone, podría volver al papel que propulsó su carrera al estrellato, uno que se confirmó tres años después (1995) con 'Casino' de Martin Scorsese, papel por el que recibió una nominación al Oscar.

Un plano sin consentimiento
No es la primera vez y por desgracia no será la última que esa industria tan supuestamente woke alberga aún tiburones campando a sus anchas. No hace falta irse a las listas de Epstein ni a los comportamientos de productores como Weinstein, en los propios sets de rodaje suceden cosas infames que pasan como anécdotas cuando son precisamente vulneraciones hacia las mujeres.
En su autobiografía, 'The Beauty of Living Twice', Sharon Stone relataba cómo, en la línea de 'El último tango en París' con Marlon Brando y Maria Schneider, Verhoeven le pidió a Sharon Stone que se quitase la ropa interior en la famosa escena de 'Instinto básico' por motivos técnicos: "Me dijeron: 'No se ve nada'. Me dieron la cinta. La vi. Fui a la cabina del proyector, le di una bofetada a Paul y llamé a mi abogado."