Tras el revival interminable de slashers ('Pesadilla en Elm Street: El origen', 'Scream', 'Destino final: Lazos de sangre'...), ha llegado a los cines la esperadísima —nótese la ironía— 'Sé lo que hicisteis el último verano' para retomar la historia que comenzó en 1997. Después de una secuela ('Aún sé lo que hicisteis el último verano'), del intento fallido por resucitar la franquicia en 2006 con la floja 'Siempre sabré lo que hicisteis el último verano' y de la serie en formato culebrón de 2021, Sony vuelve a intentarlo. Esta vez apostando por regresar a la esencia original... con un resultado que, si bien arranca algunas risas y gritos, deja muchas más dudas.
La nueva historia se sitúa 30 años después de los eventos originales, pero arranca exactamente igual: un grupo de amigos presencia un accidente mortal en Southport durante la noche del 4 de julio y deciden encubrirlo. Un año más tarde, comienzan a recibir mensajes amenazantes con la ya clásica frase: "Sé lo que hicisteis el último verano".
Cuando la nostalgia es la única carta
Con la premisa establecida y considerando que esta saga es recordada más por la nostalgia que por el cariño del público y de la crítica (pues nunca gozó de grandes valoraciones), la directora de la película, Jennifer Kaytin Robinson, ('Revancha ya' y coguionista de 'Thor: Love and Thunder') decide jugar esa carta a su favor.
La nueva entrega no pretende reinventarse en absoluto. De hecho, es autoconsciente, sabe de donde viene y apuesta por recuperar la esencia de las entregas originales sin demasiadas pretensiones. Al fin y al cabo, los fans tampoco pedían mucho (sobre todo tras sobrevivir al fallido intento de 2006). Para ello, parte del esquema del clásico se repite: jumpscares que dependen del golpe sonoro y asesinatos sangrientos, algunos bastante ingeniosos y otros más rutinarios, a los que se suma una generosa dosis de fanservice, que a veces funciona y en otras se siente demasiado forzada.

Los elementos clave del género, como la estereotipación de los personajes típicos del slasher, no solo están presentes, sino que se llevan al extremo. Curiosamente, esa exageración es una de las decisiones más acertadas de la directora: llevarlo todo al absurdo para arrancar risas. Un ejemplo perfecto se aprecia en Danica Richards, interpretada por una carismática Madelyn Cline ('Outer Banks') que rápidamente llama la atención de todas las miradas.
Su personaje, pura caricatura, es una joven con ego descomunal, emocionalmente inestable y obsesionada con mantener su estética por encima de todo. Para quienes recuerdan a Helen (Sarah Michelle Gellar) en la cinta original, Danica no solo la iguala: la supera en dramatismo y descaro.
El guion, el verdadero asesino
Sin embargo, el guion es el gran talón de Aquiles. Aunque propone una trama ligera y salpicada de humor, se diluye entre giros forzados y decisiones absurdas que no parecen tomarse en serio ni al público (de acuerdo, nadie espera un slasher con lógica impecable... pero la cinta a veces roza el disparate) ni a los fans más fieles, a quienes intenta seducir a base de toneladas de referencias y fanservice.

La película vive por y para la nostalgia... y no lo disimula. Siguiendo la fórmula de las últimas películas de 'Scream' (mezclar caras nuevas con veteranas), su gran reclamo es el regreso del elenco original: Jennifer Love Hewitt retoma a Julie James y Freddie Prinze Jr. a Ray Johnson, ahora en modo mentores que intentan guiar a los jóvenes para detener al asesino.
Es aquí donde encontramos otro de los problemas, no porque aparezcan demasiado, sino porque la trama coloca en sus manos gran parte de las decisiones clave de la película, restando peso real a la nueva generación. Y es una pena, porque el joven elenco es interesante: Madelyn Cline, Jonah Hauer-King ('La sirenita'), Chase Sui Wonders ('The Studio'), Sarah Pidgeon ('Pequeñas cosas hermosas') y Tyriq Withers ('El mejor'), pero la mayoría de ellos terminan siendo infrautilizados, atrapados en una narrativa que prioriza la nostalgia por encima de sus personajes.

La película se podría resumir a la perfección con una frase que pronuncia la propia Julie (Love Hewitt) en un momento de la película: "La nostalgia está sobrevalorada". Porque eso es precisamente lo que ocurre en esta nueva entrega. 'Sé lo que hicisteis el último verano' parte de una idea interesante y consigue mantener viva la esencia del original, alimentándose de generosas dosis de fanservice. Sin embargo, aunque el guion exhibe ciertos destellos de ingenio en su humor autoconsciente y su, en ocasiones, tono paródico, se pierde entre giros inverosímiles y decisiones absurdas que no parecen tomarse en serio ni a la audiencia que busca un slasher eficaz, ni a los seguidores más fieles de la saga.
'Sé lo que hicisteis el último verano' se estrena en cines el 18 de julio.