Galaxia abierta

Es difícil que en una octava entrega te sorprendan: Yo no lo esperaba, y más viniendo de la entretenida, pero cero innovadora El Despertar de la Fuerza.

Johnson ha hecho un gran trabajo creativo, donde toma elementos no vistos en anteriores películas, pero sí en literatura de Star Wars para ofrecer no caer en un abuso de la nostalgia y copia-pega de la trilogía original. Kylo se vuelve un antagonista creíble, Luke se llena de claroscuros, la última hora es maravillosamente sorprendente e inesperada, Holdo y Poe brillan, el ambiente consigue el objetivo de oprimir, algunos momentos para la nostalgia muy potentes (Ay, Leia :(; Ay, los soles gemelos).

Tiene también sus partes malas, que no permiten que llegue al sobresaliente, como la falta de ritmo al principio, alguna pelea memorable o el abuso del humor a destiempo, y Rose, cuyo personaje sobra totalmente.

Si quieres ver una repetición de el Imperio Contraataca, no es tu película. Si te gusta ver como la galaxia y sus posibilidades crecen, a disfrutar.