Mr. Selfridge

Ambientada en Londres y entre 1908 y 1928, narra cómo gestó Harry Gordon Selfridge su imperio empresarial con sus grandes almaneces. Estadounidense de nacimiento, Selfridge abre el primer centro comercial de Londres, en Oxford Street, convirtiéndolo en uno de los símbolos de la capital del Reino Unido. Los grandes almacenes Selfridges son un pequeño paraíso dentro del bullicio de la ciudad. En las majestuosas galerías comercial hay moda, complementos, perfumes, todo lo que los clientes de la época podían desear. Gracias a sus métodos innovadores, Mr. Selfridge se convertirá en uno de los empresarios más poderosos de la capital británica. Dotado de una gran personalidad y con un gran espíritu emprendedor, Selfridge conquistará también a la alta burguesía londinense, que inicialmente era reacia a abrir sus puertas a un empresario extranjero. Sin embargo, no todo brilla alrededor de Mr. Selfridge, su afición al juego y su fama de mujeriego le darán más que un problema, a él y a Rose, su sufrida esposa. Pese a ello, las galerías comerciales Selfridges se convertirán en un punto de encuentro de diferentes clases sociales en una época en la que el mundo está cambiando rápidamente.