El cambio radical de vida de Sylvester Stallone y otras 9 curiosidades de 'Rocky'

Antes de grabar su firma en la historia del cine con 'Rocky', Stallone trataba de salir adelante como actor mientras trabajaba de acomodador en un cine. Su sueldo en el Loew's Kings Theatre de Brooklyn, que cerró sus puertas poco después del estreno de 'Rocky', era de tan solo 36 dólares a la semana. Lo justo para tener tan pocas comodidades como el protagonista de la película.

Stallone tenía una historia que contar. En tan solo tres días escribió el primer borrador del guion, que tenía una perspectiva mucho más oscura que lo que vimos finalmente en pantalla. Tras unas nueve revisiones del libreto, se rebajó el tono sombrío al eliminar ideas como que Mickey debía ser un racista amargado y que Rocky tenía que abandonar la pelea final para demostrar su falta de interés en el cínico mundo del boxeo profesional.

La soledad de Rocky quedaba aliviada por la presencia de sus mascotas, entre las que destacaba su perro Butkus. Stallone tenía claro que esta película integraría su personalidad y tal fue su implicación que Butkus era su propio perro, al que dio la oportunidad de convertirse en una estrella al mismo tiempo que él. Antes del rodaje se vio obligado a venderle por su lamentable situación económica, pero nada más vender el guion lo recuperó inmediatamente.

Hasta que se produjo el estreno de 'Rocky', Talia Shire había destacado únicamente por su trabajo bajo las órdenes de su hermano, Francis Ford Coppola, en la franquicia de 'El padrino'. De hecho, llegó a recibir una nominación al Oscar en 1975 por su memorable interpretación de Connie Corleone, pero quería desmarcarse fuera del entorno familiar. Por eso aceptó cobrar la ridícula cifra de 7.500 dólares con tal de poder trabajar junto a Stallone en 'Rocky' encarnando a Adrian, que supondría su segunda nominación a los premios de la Academia.

Stallone no se encontraba en el culmen de su carrera cuando estaba buscando comprador para el guion de 'Rocky'. El actor estaba al borde de los números rojos cuando se topó con los productores Irwin Winkler y Robert Chartoff, que mostraron su interés por hacerse con el libreto, pero Sly les puso la condición inquebrantable de que él debía ser el protagonista. Esa cláusula complicó la pre-producción, porque United Artists prefería a estrellas del momento como Ryan O'Neal o Burt Reynolds, pero finalmente Stallone se salió con la suya.

La sala de montaje es el hogar de la magia del cine. El momento más épico de 'Rocky', la conquista de las escaleras, fue tal porque confluyeron el efecto de la música y de la imagen con una maestría superior, pero cuando se estaba rodando no se planteó como vimos en la película final. Avildsen planteó el espectacular momento final a la inversa, acercando la imagen en vez de alejándola, pero una vez que la música estaba compuesta, se invirtió el efecto de cámara para ofrecer una panorámica de la ciudad con Rocky en su epicentro.

El rodaje de la película se extendió a lo largo de un mes. Un periodo muy exigente físicamente para Stallone, que fue previsor y pasó medio año practicando junto al entrenador Jimmy Gambina, también actor en la cinta y consultor durante la producción. El entrenamiento dio resultado, y la carrera por las calles de Filadelfia es buena muestra de ello.

Cuando uno ve una película de boxeo lo normal es pensar que su realizador está al tanto de las vicisitudes del mundillo de la lucha profesional, pero John G. Avildsen no entraría en esa categoría. El director afirmó que antes de vincularse a 'Rocky' no había visto un solo combate de boxeo ni una película centrada en ese ámbito, lo cual le permitió ofrecer un punto de vista amoldado a las particularidades de la historia de Stallone.

'Rocky' iba a contar con un presupuesto de dos millones de dólares, pero United Artists rebajó a la mitad esa cifra debido a la imposibilidad de contar con una estrella por la exigencia de protagonismo de Stallone. El estudio fue tan férreo que anunció a los productores que si se pasaban del millón de dólares tendrían que cubrir ellos los gastos. Superaron la cifra por 100.000 dólares, que se consiguieron hipotecando las casas de sendos productores.

Apollo y Rocky no tardaron demasiado en dedicarse puñetazos. Cuando Carl Weathers estaba en medio de su prueba para encarnar a Creed, le propinó un fuerte golpe en la barbilla a Stallone, que le dijo que se relajara. Weathers se enfadó y exigió hacer la prueba con un verdadero actor y no con un doble cualquiera. Avildsen le dijo que el protagonista y guionista se encontraba ante él, y Weathers no se achantó tras su garrafal error y dijo: "Bueno, puede que mejore." Algo logró mejorar Stallone como actor, porque fue nominado a los Oscar en esa categoría principal.