George Clooney ha perdido el interés en actuar: "Nadie quiere verme besar a la chica ya"

Políticamente, Clooney tiende evidentemente hacia el Partido Demócrata, que es básicamente el archienemigo de la todopoderosa Asociación Nacional del Rifle. Michael Moore ya trató de acercarse al presidente de aquella asociación a comienzos de este siglo, Charlton Heston, y el resultado fue una de las secuencias más tensas que hemos podido ver en un documental. En 2003, Clooney le dedicó un comentario de mal gusto a al protagonista de 'Ben-Hur': "Charlton Heston ha anunciado otra vez hoy que tiene Alzheimer". Obviamente se lanzaron sobre él para que rectificara, pero él se mantuvo firme: "Me da igual. Es el líder de la Asociación Nacional del Rifle. Se merece cualquier cosa que digan de él". Supuestamente terminó disculpándose por carta, pero quedó bastante claro que nunca se tomarían un par de cañas juntos.

Los castings no fueron siempre un camino de rosas para Clooney. Después de realizar cinco pruebas para hacerse con el rol de J.D. en 'Thelma y Louise', Ridley Scott se decantó por Brad Pitt, que una década después sería su compañero de robos a gran escala. El papel empujó a Pitt a la fama, dando pie a una década tremenda para el actor. En cambio, a Clooney le costó algo más poner la quinta marcha.

El amor de George Clooney por la cerveza es público y notorio. Su voz ha enganchado a más de uno a beber Budweiser, ya que acompaña a los anuncios de la compañía. Además, supuestamente su camerino en 'Ocean's Eleven' era el paraíso de las fiestas adolescentes americanas, porque tenía instalado un barril de cerveza para poder acudir a él cuando le viniera en gana.

No todo son sonrisas cuando Clooney se cruza con sus colegas de Hollywood. Uno de los conflictos más referenciados en la historia reciente de los rodajes estuvo protagonizado por el actor y David O. Russell. Durante el rodaje de 'Tres reyes', el impetuoso cineasta supuestamente ridiculizó a varios figurantes y a Clooney no le hizo demasiada gracia, la tensión se elevó rápidamente y ambos terminaron enzarzados en una pelea a puñetazo limpio.

Clooney era tan fan de 'South Park' que bautizó la serie en su primera temporada. Contactó con uno de sus creadores, Trey Parker, y le dijo que estaba interesado en prestarle su voz a algún personaje. El afamado actor acabó doblando al perro homosexual Sparky, es decir, que se dedicó básicamente a reproducir las típicas onomatopeyas caninas. Dos años más tarde, le reservaron un papel con diálogo en la película de la serie, un guiño a su paso por 'Urgencias'.

La soltería de George Clooney fue prácticamente un asunto de Estado, tanto que sus colegas de profesión llegaron a apostar acerca de su futuro familiar. Nicole Kidman y Michelle Pfeiffer apostaron 10.000 dólares cada a una a que Clooney sería padre antes de los 40. Ambas fallaron y le mandaron sus respectivos cheques al afectado, que se los devolvió y dobló la apuesta: no tendría hijos antes de los 50. Una vez más se llevó el gato al agua, pero a finales de 2014, a los 53 años, terminó cediendo y contrajo matrimonio con Amal Alamuddin, con la que actualmente espera gemelos.

Cuando todavía no había alcanzado el estatus de estrella, Clooney se quedó sin la oportunidad de participar en una de las películas más relevantes de los noventa. El actor se presentó al casting para interpretar al señor Rubio en 'Reservoir Dogs', pero Michael Madsen terminó imponiéndose en la lucha por el rol. Cuatro años después, Quentin Tarantino y Clooney fueron hermanos ficticios en 'Abierto hasta el amanecer'.

En las manifestaciones no solo son susceptibles de ser detenidos los ciudadanos rasos. En 2012, durante una protesta frente a la Embajada de Sudán en Washington, motivada por la preocupante crisis humanitaria vivida en el país africano, tanto Clooney como su padre fueron detenidos por la policía. Tuvo que pagar 100 dólares de multa para evitar el juicio, y pudo manifestar su preocupación al presidente Barack Obama en una reunión privada.

Las amistades pueden ser etéreas en Hollywood, pero Clooney ha sabido rodearse del mejor talento. Su amigo y asiduo colaborador, Grant Heslov, con quien escribe y produce, invirtió en la carrera de Clooney cuando este todavía no había cruzado el umbral de la popularidad. En 1982 Heslov le dejó 200 dólares para que se hiciera un book fotográfico en condiciones, y no pudo gastar su dinero de mejor manera.

Después de atravesar el país para afianzarse en Los Ángeles, Clooney no tuvo mucho espacio para descansar por las noches. En aquellos tiempos en los que tuvo que buscarse la vida nada más llegar a la meca del cine, el aspirante a actor dormía en el ropero de un amigo. La falta de oxígeno no afecto a su sonrisa.