å

NOSTALGIA TEEN

Así se rodó el mítico beso lésbico de 'Crueles intenciones' que cumple 20 años

La película dirigida por Roger Kumble ha terminado por convertirse en una cinta adolescente de culto. Sarah Michelle Gellar y Selma Blair recuerdan el momento.

Por Clara Giménez Lorenzo 23 de Marzo 2019 | 12:51

Comparte:

¡Comenta!

'Crueles intenciones', una de las cintas adolescentes que inició el nuevo milenio, acaba de cumplir veinte años, y también lo ha hecho uno de sus momentos más míticos: el beso entre Sarah Michelle Gellar y Selma Blair. Ahora, ambas actrices han hablado lo que significó rodar en su día la escena.

Fotograma de 'Crueles intenciones'

Entertainment Weekly ha entrevistado conjuntamente a los dos intérpretes, que son amigas en la vida real. El momento en el que la pérfida Kathryn enseña a la inocente Cecile a besar fue rodado en Central Park una tarde de mayo, por lo que la afluencia de público no era precisamente pequeña: "Era el primer día de buen tiempo en Central Park, así que imagina a los neoyorquinos (...). Habría fácilmente 300 personas", ha recordado Gellar, a lo que Blair ha añadido: "Sarah era muy conocida, así que tenía más presión. Yo recuerdo que tomamos helado antes y estuvimos comprobando nuestros dientes". Gellar también ha aportado un detalle desconocido: "Como había tanta gente y el sonido era horrible, la escena entera fue grabada en el estudio de sonido".

Clásico adolescente

Ambas actrices llegaron a ganar el MTV Movie Awards al Mejor Beso por su inolvidable interpretación. "Tengo que decirlo, probablemente es el premio del que más orgullosa esté. MTV, para nuestra generación, era el reconocimiento más grande que uno podía ganar", ha admitido Gellar.

La cinta dirigida por Roger Kumble en la que un grupo de ricos adolescentes neoyorquinos pone al límite su moralidad ha terminado por convertirse en un clásico adolescente junto a otras producciones de la época como 'Caramelo asesino' o 'Chicas malas'. Afortunadamente, ahora es más común ver a dos mujeres besarse en la gran pantalla; la mítica escena de Central Park resonó tanto que incluso tuvo su parodia dos años después en 'No es otra estúpida película americana'.