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CRÍTICA ECARTELERA

'Para toda la muerte': Una comedia negra que se queda a mitad de camino

Os contamos nuestra opinión sobre la nueva comedia negra de Los Compadres Alfonso Sánchez y Alberto López, que se estrena este 31 de enero.

Por Marta Arranz Clemente 31 de Enero 2020 | 10:00

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'Para toda la muerte' es a priori la típica comedia negra en la que su argumento y todos sus personajes giran en torno al humor negro. Sin embargo, la película no termina de estallar en ningún momento, teniendo solo como momentos cúlmenes el inicio y el final de la misma. El largometraje dirigido por Alfonso Sánchez cuenta la historia de José Vicente (Alberto López), un hombre que lleva opositando ocho años para conseguir su ansiada plaza de funcionario. Pero cuando cree que ya la ha conseguido, recibe una llamada en la que le dicen que ha habido un error administrativo y que en realidad es el primer suplente.

Imágenes de 'Para toda la muerte'

Ante la desesperación por no decepcionar a sus seres queridos, José Vicente irá en busca del opositor anterior, Hugo (Joaquín Ortega), con el objetivo de matarle para quedarse él con la plaza. Lo que no se espera es que no es el único que quiere acabar con él, entre ellos se encuentra Pepa (Estefanía de los Santos), una mujer misteriosa que no cejará hasta conseguir su meta, y Antonio (Alfonso Sánchez), un hombre movido por los celos.

La película comienza con un planteamiento fuerte que parece prometer una comedia llena de un humor basado en el absurdo y de momentos surrealistas enmarcados en una situación de desesperación. Pero que según va a avanzado en su trama, se va desinflando cada vez más, llegándose a convertir en un cúmulo de situaciones que se pueden hacer repetitivas para el espectador.

Todas ellas se centran en una misma idea cómica: por más que sus protagonistas intentan asesinar a Hugo, este es imposible de matar. Además, comienzan a introducirse personajes cada vez más orientados al humor absurdo que, aunque le aportan un cierto giro más novedoso dentro de la trama, no acaban tampoco de explotar a nivel cómico.

Personajes esperpénticos

A pesar de todo ello, sí que cabe destacar las grandes actuaciones de Alberto López, Estefanía de los Santos y Alfonso Sánchez que han sabido introducir en su piel a la perfección el papel de tres personajes esperpénticos, exagerados y cargados de humor negro como lo son José Vicente, Pepa y Antonio respectivamente.

Hacer también especial mención al hecho de que sus protagonistas no han utilizado dobles en las escenas de acción para hacerlo todo más real, y, por supuesto, resaltar que el personaje de Hugo sea interpretado por un especialista que hace mucho más realista también todas las situaciones vividas en la película hasta tal punto que hay algunas en la que el espectador puede sufrir un poco. Por ejemplo, una escena en la que se puede ver claramente la cara de Hugo mientras le están ahorcando con una cuerda.

Imágenes de 'Para toda la muerte'

En cuanto a Alfonso Sánchez en su papel como director, ha decidido apostar por el realismo a la hora de rodar las escenas, aprovechando además que contaba con un especialista, hecho que me parece que está muy bien pensado. Sin embargo, considero que muestra ciertos planos de Hugo cuando le están intentado matar que podían haber sido menos explícitos, pues pueden resultar desagradables para algunos espectadores y restarle relevancia a la parte cómica.

En definitiva, 'Para toda la muerte' se trata de una película plagada de humor negro con situaciones y personajes surrealistas que probablemente sean bien recibidos por parte del público que lo vea, pero que por otros será recibido como un largometraje cargado de situaciones repetitivas que, aunque cuenta con algunos momentos cómicos, por lo general no llega a explotar en ningún momento, quedándose a mitad de camino de lo que podía haber sido una gran comedia negra.

Nota: 5

Lo mejor: la interpretación de sus actores que llevan el humor intrínseco y que han captado la esencia de sus personajes a la perfección.

Lo peor: se hace repetitiva y no acaba de conseguir el toque cómico que busca.