å

CRÍTICA

'Volver a empezar (Herself)': Poderoso alegato contra la violencia machista

Crítica de 'Volver a empezar (Herself)', dirigida por Phyllida Lloyd. Protagonizada por Clare Dunne, Harriet Walter, Conleth Hill y Cathy Belton. Mostrada en el Festival de Sundance 2020.

Miguel Ángel Pizarro
Por Miguel Ángel Pizarro Más 4 de Diciembre 2020 | 10:10
Colaborador de eCartelera. Apasionado del cine y la cultura en general. Cine europeo y de animación, mi especialidad.

Comparte:

¡Comenta!

El cine en Europa siempre se ha caracterizado por tener una perspectiva social. Más allá de películas comerciales, de autor, han existido varios títulos con vocación de dar voz y rostro a esas historias que las producciones de Hollywood no han prestado atención. En esto, los británicos han tenido a dos grandes maestros: Ken Loach y Mike Leigh. En la línea de los tiempos actuales, por fin van llegando voces femeninas al cine social europeo, que hablan desde otro enfoque pero que también invitan a la reflexión.

Volver a empezar (Herself)

Tras haber dirigido dos películas tan diferentes como '¡Mamma Mia! La película' y 'La dama de hierro', la cineasta Phyllida Lloyd regresa con una propuesta de denuncia social en clave optimista. Eso sí, la realizadora no abandona la mirada sobre la fortaleza femenina, pues 'Volver a empezar (Herself)', presentada en el Festival de Sundance 2020, busca denunciar la situación de las mujeres que son víctimas de violencia machista y de cómo el sistema judicial -en este caso de Irlanda- no las protege lo suficiente, como tampoco a sus hijos, que deben seguir viendo a sus padres agresores

Lloyd dirige un guion escrito a dos manos por Malcolm Campbell y Clare Dunne, quien también protagoniza la película. Lo que diferencia a 'Volver a empezar' de otras producciones similares como 'Ladybird, Ladybird', 'Te doy mis ojos' o 'Custodia compartida', es que intenta ofrecer una luz de esperanza en medio de una situación de penumbra. Lo hace de forma realista, sin sentimentalismos y de una manera que busca mostrar que el apoyo de una red de colaboración, especialmente de mujeres, puede ayudar a encontrar una salida a una situación límite.

Volver a empezar (Herself)

Un mensaje de esperanza para las víctimas

Porque Sandra, la protagonista, tiene que malvivir con sus hijas en un hotel cercano al aeropuerto -en el que tiene que entrar por la puerta de atrás-, porque tiene que tener dos trabajos para poder llegar a fin de mes mientras espera en una larga lista a un alquiler social. Además, tiene que lidiar con las consecuencias físicas y psicológicas de haber sufrido malos tratos. El retrato es inhóspito y el guion de Campbell y Dunne podría haber tirado solamente por la mirada social, denunciando la situación de riesgo de exclusión social de mujeres de clase trabajadora que sufren violencia machista. Solamente con eso, Lloyd hubiera firmado un magnífico filme de denuncia.

Pero Lloyd busca contar una historia con mirada optimista, sabiendo que dicha realidad necesita una respuesta para salir de ese círculo vicioso. Para ello, la cineasta alude a la antigua palabra irlandesa "meitheal", que hace referencia al trabajo en común, cuando todos unen fuerzas para ayudarse. Ahí reside la principal fuerza de un largometraje hecha con dedicación y compromiso, que trae una mirada femenina al cine social británico, pues la directora ya ha anunciado su intención de continuar narrando esas historias que las producciones más mainstream no abordan.

Nota: 8

Lo mejor: La interpretación de Clare Dunne, su denuncia a la fragilidad de las mujeres maltratadas y su reivindicación de la fuerza y fortaleza femenina.

Lo peor: Su mirada optimista puede hacer que la cinta sea infravalorada por cierto sector del público.

Películas