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UNA CARRERA DESIGUAL

La cara y la cruz de Mel Gibson

El actor norteamericano acumula una carrera con muchos altibajos tanto como actor como director, además de algunos escándalos que pasarán a la historia.

Por Alejandro López Reina 3 de Enero 2016 | 13:09

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Mel Gibson pasará a los anales de la historia del cine. Actor, director y productor, acumula un sinfín de éxitos así como numerosos fracasos tirando hacia la época actual. Podría haber llegado a ser de los actores más aclamados de Hollywood pero sus continuos escándalos fuera de la gran pantalla le llevaron al limbo. Para muchos será recordado por su papel de William Wallace en 'Braveheart' ,con la que logró cinco Oscar incluyendo Mejor Película y Mejor Director (un resultado sensacional), su trabajo como protagonista en 'Mad Max, salvajes de autopista' o su tándem con Danny Glover en 'Arma Letal'. Si ya analizamos su carrera como director destacamos 'La Pasión de Cristo' o su gran trabajo en 'Apocalypto'.

Sus mayores logros

Mad Max

Con 'Mad Max' nos conquistó a todos. La visión apocaliptica sobre el futuro expuesta por George Miller produjo una oleada de fans y llegaron a recaudar más de 100 millones de dólares con un presupuesto de tan sólo 350.000 dólares. Su aire chulesco y sus buenas formas en este filme de acción lo dejaron muy claro: había nacido una estrella.

'Gallipoli' fue uno de sus mejores papeles. Este drama bélico narra como dos amigos atletas se alistan en el ejército australiano para combatir contre los turcos en la Primera Guerra Mundial. El papel de Gibson (excelente escena final) conmovió a los espectadores así como su química con Mark Lee, en una historia donde la amistad y la valentía son sus mejores virtudes.

En 1983 volvería a coincidir con el director Peter Weir y protagonizó 'El año que vivimos peligrosamente', un drama bélico que relató la dureza que se vivía durante los 60 en Indonesia. Gibson interpretó a un inexperto reportero que no se lo piensa a la hora de abrazarse al peligro. Al actor se le ofrecían numerosos papeles y decidió lanzarse a 'Motín a bordo' donde compartiría cartel con Anthony Hopkins. La película llegó a buen puerto y la imagen de Mel Gibson como chico rebelde iba in crescendo.

Un éxito tras otro

Braveheart

1987, llega a las manos de Mel Gibson una de sus sagas más recordadas: 'Arma Letal'. Su química con Danny Glover nos encantó a muchos, lo que derivó en tres entregas más. Gibson cumplió con creces como un policía algo psicótico y superado por las circunstancias. Llegó incluso a interpretar a 'Hamlet' compartiendo protagonismo con Glenn Close, algo que dice mucho de su versatilidad. Tras varios trabajos sin pena ni gloria como 'Maverick' o 'Rescate' llega su mejor película: 'Braveheart'. Dirigida y protagonizada por él mismo, nos dejó una cinta para enmarcar. Era una auténtica estrella de Hollywood y las buenas críticas volaron por todas partes.

Pasión de Cristo

La década de los 2000 nos dejó varias buenas obras de Gibson como 'El patriota' donde compartía protagonismo con el tristemente fallecido Heath Ledger. Tuvo espacio para la comedia con '¿En que piensan las mujeres?', para el terror psicológico con 'Señales' e incluso para el cine bélico con 'Cuando eramos soldados'. 'La Pasión de Cristo' y 'Apocalypto' fueron sus mejores trabajos como director. Lástima que a partir de aquí su carrera fuese en picado.

El fracaso persigue a Mel Gibson

Lamentablemente nuestro prolífico actor ya no sabía elegir bien sus proyectos. Todo comenzó con 'Al límite' en lo que supuso el intento por volver al género de acción sin rumbo ninguno. Un auténtico chasco sin pies ni cabeza en el que un personaje sólo busca venganza a lo Liam Neeson. A pesar de su sorprendente papel en 'El castor', el filme no dejó de ser algo espeso y carente de carisma. La crítica afirmaba que podría tratarse de la vuelta del mejor Gibson... pero no.

Los mercenarios 3

'Vacaciones en el infierno', a pesar de ser un thriller de acción entretenido, no estaba a la altura del veterano actor. No pudo resistirse a trabajar con Robert Rodríguez en 'Machete Kills', la cuál supuso un auténtico despropósito. Gibson fue de perdidos al río y decidió interpretar al villano de 'Los mercenarios 3'. Su enfrentamiento con Sylvester Stallone y compañía resulta más cómico que entretenido. Lo siguiente que nos ofrecerá este actor es 'Blood Father'. He de decir que buena pinta precisamente no tiene. También trabaja como director en un proyecto titulado 'Hacksaw Ridge'.

El alcohol y la mala vida pasan factura

Es bien conocida la afición de Mel Gibson a darle a la botella y a protagonizar episodios vergonzosos. Como declaró el propio actor, sufre de alcoholismo desde los 13 años y no es que lo haya dejado precisamente. A su carácter maníaco depresivo se le unen unas expresivas declaraciones del director Richard Donner en las que afirmaba que Mel Gibson confesó que se bebía hasta cinco pintas de cerveza mientras desayunaba.

En 1984 tuvo un accidente de coche en Toronto con unas cuantas cervezas de más, lo que provocó su primera retirada del carnet. Decidió mudarse a su granja de Australia a combatir sus problemas con la bebida (no duró mucho). En 1991 decidió dejar la interpretación durante un tiempo para tratarse. El problema fue cuando el The Sunday Mirror publicó unas fotos suyas asistiendo a reuniones de Alcohólicos Anónimos. Cuando pasaba la treintena tuvo una recaída y llegó a pensar en el suicidio.

Mel Gibson borracho

El 28 de julio de 2006 volvió a ser detenido por conducir en estado de embriaguez. Tenía incluso latas de cerveza desperdigadas por el coche y declaró: "Mi vida ha terminado. Estoy jodido. Robyn me va a dejar". Además, intentó agredir al policía que lo arrestó propinándole varios insultos: "¿Es usted judío?". "Putos judíos", espetó al policía. "Los judíos son los responsables de todas las guerras en el mundo", zanjó. Su poco amor por los judíos es de sobra conocido, en unas sorprendentes declaraciones afirmó que John Lennon merecía morir. Joe Eszterhas, guionista que ha trabajado con el actor en alguna ocasión le señaló como antisemita y afirmó que en ocasiones utiliza términos despectivos hacia los judíos como "hornos de gas".

No sólo eso, sino que agrupaciones de judíos por todo el mundo protestaron en contra de 'La Pasión de Cristo' por la que declararon que se representaba a su etnia de una forma sanguinaria y sin corazón. Palos por todas partes. Y ya si nos ponemos a analizar su ideología homófoba apaga y vámonos.

Muchos de vosotros estaréis al tanto de su relación con su ex-mujer Oksana Grigorieva a la que golpeó incluso con su hijo en brazos. Joe Eszterhas también aseguró que Gibson le declaró lo siguiente: "La voy a matar. Voy a conseguir a alguien que la mate". Eszterhas asegura que el actor contó a su hijo de 15 años en una ocasión que deseaba mantener relaciones sexuales con su exnovia y "apuñalarla hasta la muerte mientras lo hacemos". Una carrera que da para hacer una película. Por desgracia, cada vez se aleja más de ese final feliz que pudo haber tenido cuando era uno de los actores más influyentes de Hollywood.

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