¿Cuántas veces nos ha pasado? Estás inmerso en una película que te encanta, y de repente, en la escena más intensa de todas, parte del público se echa a reír. Son risas tímidas, desorientadas, pero aún así te indignan. A veces uno no conecta con un dramón, y le da la risa tonta. Otras veces, no pillamos lo que el director nos quiere decir. La mayoría de las veces, nos reímos porque algo nos pone nerviosos, porque no somos capaces de entenderlo.
Eso le debe de estar pasando a parte del público que está yendo a ver 'La chica danesa', recién estrenada en las salas españolas. La película de Tom Hooper, con 4 nominaciones a los Premios Oscar y dos protagonistas en estado de gracia, Eddie Redmayne y Alicia Vikander, cuenta la historia de Lily Elbe, la primera mujer transexual que se sometió a una operación de cambio de sexo.
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Deberíamos congratularnos de que Hollywood haya dado un espacio tan visible a este tipo de historias, en una industria en la que la visibilidad LGTB parece avanzar un poco más cada año. Y en un año en el que Caitlyn Jenner ha acaparado portadas y titulares, junto con otras figuras como Laverne Cox: la transexualidad es cada vez más mainstream. Pero ¿de verdad está el gran público acostumbrado? ¿Se ha normalizado el tema?
Parece ser que no, por lo que están comentando algunos espectadores en las redes sociales y efectivamente está ocurriendo en las salas de cine en las que se proyecta la película distribuida por Universal. Esas risas nerviosas, y en algunos casos carcajadas absolutamente irrespetuosas, se están dando en algunas de las escenas más serias del metraje. ¿Falta educación? Sí, mucha.
Me quedé en shock de que había mucha gente riéndo a carcajadas en la función de "La chica danesa".De pena ajena su reacción.Triste el asunto
? Dary Mantecón (@dary83) enero 13, 2016
