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TERROR OCULTO

7 rarezas para pasarlo mal en Halloween si eres fan del terror

En estas siete películas de terror para Halloween descubrirás joyas ocultas aunque interesantísimas que harán que pases auténtico miedo.

Por Álvaro Manuel García García 27 de Octubre 2019 | 11:18

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Halloween. La noche de los muertos. El momento perfecto para que los fans del terror de medio mundo se unan delante del televisor y le den al play a sus películas favoritas. Sin embargo, ¿qué pasa cuando ya lo has visto todo? ¿Cuándo ni Michael Myers puede asustarte? ¿Y si esta vez es el turno de descubrir algo nuevo, insólito, que te desconcierte pero al mismo tiempo haga que pases un rato de miedo?

La abuela

Hablemos del formato. Habitualmente, corto, medio y largometraje han ocupado categorías completamente separadas dentro del cine. Todos podremos haber visto 'Pesadilla en Elm Street', sí, pero, ¿a cuántas películas de terror de 15 minutos hemos decidido concederles una oportunidad? Puestos a explorar nuevas propuestas, ahí hay un foco interesantísimo de ideas por descubrir.

El terror más libre

Hemos recopilado siete propuestas muy distintas entre sí para hacer de tu noche terrorífica una quedada lo más diversa posible. Desde cineastas experimentales hasta el cine japonés más salvaje, esta antología demuestra que el cine de los márgenes no tiene nada que envidiar al producido con grandes presupuestos.

Además de las diferencias en cuanto a nacionalidad, también existen diferencias temporales. Con esta idea, en la recopilación se pueden ver tanto películas recientes (década de los 90 o los 2000) como cintas de los 70 u 80. Esto ayuda a visualizar las diferencias técnicas y temáticas de cada periodo, obteniendo así una visión más global del cine de terror. El miedo, eso sí, no empieza hasta que apagues la luz, te subas la manta, y empiece el espectáculo.

7 rarezas para pasarlo mal en Halloween

'Last Days in a Lonely Place' (Phil Solomon)

'Last Days in a Lonely Place' (Phil Solomon)

El cine basado en videojuegos es conocido por tener una reputación digamos cuestionable. Ahora bien, ¿qué pasa si la película se crea dentro del propio juego? Tras una tarde jugando al GTA: San Andreas, el cineasta estadounidense Phil Solomon se fijó en algo que le llamó la atención: las hojas de los árboles se movían.

La belleza de este paisaje virtual desencadenó en 'Last Days in a Lonely Place'. La obra, sin embargo, poco tiene que ver con el tono desenfadado del juego de Rockstar. Aquí, el condado de San Andreas sirve como marco para dibujar un relato lúgubre y existencialista que envuelve al espectador en su tristeza. El resultado gustó tanto que haría más películas usando la misma técnica: 'Crossroads' (2005), 'Rehearsals for Retirement' (2007) y 'Empire' (2008).

'Begotten' (E. Elias Merhige)

'Begotten' (E. Elias Merhige)

El terror cósmico ha servido como ambientación para numerosos escritores de terror desde sus inicios. La mitología desplegada en los mitos de Cthulhu de H.P. Lovecraft abrieron una nueva vía para que el horror escrito se reformulase. En el cine, sin embargo, no es tan habitual encontrar películas que ahonden en esta temática. 'Begotten' es una de ellas.

Desde el primer minuto, la sordidez y oscuridad del relato es indudable. La película no escatima en contenido explícito, que sumado a la fotografía sucia y amateur consigue crear una atmósfera asfixiante y depresiva. Respecto a la trama, solo es posible elucubrar sobre la presencia de un dios monstruoso que pare a un hombre, el cual será torturado por misteriosas figuras encapuchadas. Casi nada.

'Guinea Pig 2: Flowers of Flesh and Blood' (Hideshi Hino)

'Guinea Pig 2: Flowers of Flesh and Blood' (Hideshi Hino)

Hablemos claro. Sin las seis películas que conforman la saga 'Guinea Pig' el gore tal y como lo entendemos hoy sería completamente diferente. Sirvió también para que el J-Horror (terror japonés) se popularizase en Occidente, donde películas como 'Flowers of Flesh and Blood' fueron confundidas por snuff movies reales.

En ella, vemos como un hombre secuestra a una mujer y la tortura minuciosamente, buscando convertir el asesinato en una obra de arte. Los efectos especiales llegaron a tal nivel de perfeccionamiento que el escritor Chris Gore entregó a Charlie Sheen una copia de la película. Este, tras verla, quedó tan impactado que contactó con el FBI para que investigasen si alguien había sido descuartizado. No trascendió a la opinión pública el estado de embriaguez del actor mientras la veía.

'Problema cada día' (Claire Denis)

'Problema cada día' (Claire Denis)

El llamado 'Nuevo extremismo francés' sirvió para definir las inquietudes artísticas de ciertos directores galos durante el comienzo del nuevo siglo. Películas como 'Pasiones secretas' de Jean-Claude Brisseau, 'Sombre' de Philippe Grandrieux, 'Le Pornographe' de Bertrand Bonello o 'Irreversible' de Gaspar Noé dejaron patente su carácter transgresor y su apuesta por la violencia física y sexual.

Sin embargo, la película que nos ocupa no es de ninguno de estos autores. Fue Claire Denis ('High Life') la encargada de filmar la cinta más interesante del periodo, la más cuidada en cuestiones de montaje, ritmo e intenciones. Donde usualmente existía solo una apuesta estética por la violencia explícita, Denis sorprende con un relato ciertamente oscuro, sí, pero también triste y profundamente melancólico, donde el hambre (físico y emocional) jamás es saciado.

'House' (Nobuhiko Ôbayashi)

'House' (Nobuhiko Ôbayashi)

Toho, la productora detrás de muchas películas de Akira Kurosawa, Kenji Mizogochi o Masaki Kobayashi, estaba deseosa de replicar el fenómeno que supuso 'Tiburón'. Para ello, confiaron el guion a Nobuhiko Ôbayashi. En vez de sumirse en un frío proceso introspectivo en el que expiar sus demonios, el guionista confió en su hija pequeña. Esta le aconsejó lo siguiente: "los adultos solo piensan sobre lo que entienden... los niños pensamos cosas que no podemos explicar".

Para cualquiera que haya visto la película, no es de extrañar que la productora rechazase en primera instancia el proyecto. El delirio creativo de Ôbayashi es total, consiguiendo romper cualquier libro de normas sobre qué se puede hacer en el cine y qué no. El cuidado extremo del diseño artístico, decorados o banda sonora logran crear momentos cómicos inigualables (el baile de la tía abuela sobre el tejado, la cabeza que muerde...) y diferenciar esta película de cualquier otra sobre casas encantadas. Un pequeño milagro.

'Outer Space' (Peter Tscherkassky)

'Outer Space' (Peter Tscherkassky)

Peter Tscherkassky se ha ganado con méritos propios ser una de las voces más importantes del cine experimental actual. En su trilogía del CinemaScope, iniciada con 'The Arrival' en 1998 y terminada con 'Dream Work' en 2001, el austriaco juega con los límites de la propia narración cinematográfica, convirtiéndola en su protagonista real.

En 'Outer Space', Tscherkassky se vale del metraje de la película 'El ente', de Sidney J. Furie para someter a la actriz Barbara Hershey a los efectos de una copiadora óptica. Esta máquina amorfa la imagen, crea flashes y aporta un efecto collage. Aquí, es el propio cine el que caza incansablemente al protagonista. Una pesadilla sin comienzo ni fin.

'La abuela (The Grandmother)' (David Lynch)

'La abuela (The Grandmother)' (David Lynch)

Ningún texto sobre películas inusuales de terror estaría completo sin una mención a David Lynch. El director (y actor, productor, guionista, músico, pintor, publicitario, fotógrafo e incluso diseñador) norteamericano ha dejado claro desde 'Cabeza borradora' (1977) que lo inexplicable es lo que más le interesa.

Ya en 'La abuela', siete años antes del inicio oficial de su carrera, se pueden intuir las características principales que se verían más adelante: la importancia del sonido en la creación de atmósferas, la belleza paradójica de los planos aberrantes, interpretaciones hieráticas fuera de cualquier realismo... En esta película, realizada a los 24 años, un niño aterrorizado por la realidad busca refugio en la fantasía en su búsqueda desesperada por encontrar amor. ¿Habla sobre el propio director o sobre sus espectadores?