Su "envejecido" especial, sus referencias y otras curiosidades de 'Death Proof'

No es nueva la devoción que siempre ha sentido Quentin Tarantino por las películas exploitation, a las cuales rindió su grandioso homenaje ideando una trama que ponía algo que siempre le ha fascinado, la figura de los especialistas (o dobles de escenas peligrosas) en el cine, bajo lo que se pueden considerar los esquemas del slasher.

Así nace 'Grindhouse: Death Proof', en la que un perturbado al que conoceremos como Stuntman Mike liquidará a jóvenes mujeres con su propio vehículo a prueba de muerte. De esta forma, Tarantino juega con las reglas del subgénero a su antojo y nos entrega uno de los productos más sugerentes del mismo.

Pese a que pueda costar imaginarse 'Grindhouse: Death Proof' sin Kurt Russell haciendo de Stuntman Mike, fueron muchos los actores que fueron considerados antes que él para el papel, y no es descabellado decir que más de uno de los de la lista hubiesen dado en el clavo.

Los tres nombres que sonaron con más fuerza fueron los de Mickey Rourke, Sylvester Stallone y John Travolta, pero también se barajaron otros como los de Bruce Willis, Willem Dafoe, John Malkovich, Ron Perlman y Kal Penn.

Si hay algo presente en toda la cinematografía de Quentin Tarantino, son los guiños y referencias a otros títulos, y es evidente que 'Grindhouse: Death Proof' no podía no tener su lista propia.

Centrándonos en Stuntman Mike, el personaje lleva el mismo reloj que el Kowalski de 'Punto límite: Cero', película a la que se hace mención en una ocasión y que también se ve reflejada en el coche que conducen las chicas, pues se trata del mismo que sale en dicho título.

Continuando con los coches, el que conduce Kurt Russell es el mismo que el que conduce John Travolta en 'Pulp Fiction'. Además, el pato que corona el parachoques delantero es el mismo que el de 'Convoy', road movie de Sam Peckinpah protagonizada por Kris Kristofferson en 1978.

Continuando con las referencias a otras películas, en el momento en el que Stuntman Mike atraviesa un cartel, pueden verse los carteles promocionales de 'Scary Movie 4' y 'Wolf Creek'. Entendemos que el primero para hacer promoción de Dimension Films y el segundo por el amor confeso que Tarantino siente por el título de Greg Mclean.

Teniendo en cuenta que 'Grindhouse: Death Proof' es todo un homenaje al cine exploit de los sesenta y setenta, destacan dos homenajes que van a más allá del mero guiño.

Por una parte, la declaración confesa de que uno de los máximos referentes para Quentin Tarantino fue la película de culto 'Faster, Pussycat! Kill! Kill!', de Russ Meyer.

Por otra, y como carta de amor al giallo, puede escucharse uno de los temas que Ennio Morricone compuso para 'El gato de las nueve colas', el tercer largometraje de Dario Argento, estrenado en 1971.

Otra forma de rendir homenaje al exploit es insertando como título 'Quentin Tarantino's Thunderbolt', antes de que este sea sustituido por el de 'Death Proof'. Así, se hace hincapié en cómo la gran mayoría de películas de esta índole, eran conocidas con diferentes títulos.

Continuando con los guiños, y aprovechando que Kurt Russell formaba parte del proyecto, Tarantino no pudo evitar recrear una serie de referencias directas relacionadas con la trayectoria del actor.

Así es como en el bar podemos ver la camiseta que lucía Jack Burton en 'Golpe en la pequeña China', o la semejanza entre la cicatriz de su ojo con la del Snake Plissken de '1997: Rescate en Nueva York' y '2013: Rescate en L.A.'.

Otro de los elementos que no podían faltar en un film de Quentin Tarantino son las referencias a sus propias películas.

En este caso, el espectador podrá oír la famosa melodía de 'Kill Bill' como politono del personaje de Rosario Dawson.

También decide realizar una especie de relectura de las formas de presentación de personajes dando vueltas con la cámara en el local donde desayunan las protagonistas, lo cual trae a la memoria directamente al prólogo de 'Reservoir Dogs'.

Michael Parks repetía su papel de Earl McGraw en 'Grindhouse: Death Proof', el Ranger de Texas al que también habíamos visto en las dos 'Kill Bill' y 'Abierto hasta el amanecer'.

Evidentemente, también estuvo en 'Grindhouse: Planet Terror', título donde se presenta como el padre de la Dra. Dakota Block, interpretada por Marley Shelton, quien también tiene una breve aparición en la película al igual que las gemelas babysitter, conformando un universo compartido entre las películas de Quentin Tarantino y la de Robert Rodriguez.

Zoë Bell, reputada doble de acción en cuyo currículum constan títulos como 'Poseidón', 'Malditos bastardos', el díptico 'Kill Bill', 'Destino final 4' o 'Iron Man 3', aceptó protagonizar 'Death Proof' con una única condición: encargarse ella misma de las escenas de acción.

Dicho y hecho, además de llevar a cabo secuencias de infarto, consiguió convertirse en una de las protagonistas absolutas de una película de carácter coral.

Para otorgar a la película un aspecto envejecido, como si de un verdadero título exploit de los setenta se tratase, se llevaron a cabo varios rasguños a través de un proceso de envejecimiento de la película para que ésta pareciese malgastada por el paso de los años. La fórmula fue utilizada tanto en 'Death Proof' como en 'Planet Terror'.

Por lo que a lo retro se refiere, Quentin Tarantino apostó por la música como elemento de teletransportación al pasado. Así es como en el bar puede verse un póster de Johnny Cash y un disco de la banda Misirlou (la del tema central de 'Pulp Fiction'), también sonará Janis Joplin cantando un tema de The Beatles, 'Baby it's you'.

En 'Grindhouse: Death Proof', Tarantino dará rienda suelta a otro de sus fetiches favoritos más allá de hacer guiños constantes y homenajear películas: el de los pies.

Ya lo hizo en 'Jackie Brown', 'Pulp Fiction' y 'Kill Bill: Vol. 1'. Incluso en 'Abierto hasta el amanecer' hizo que Salma Hayek se convirtiera en su objeto del deseo con aquel inolvidable baile con comida de pie incluida.

En su particular título exploit, Tarantino explota al máximo su obsesión por los pies femeninos, convirtiendo algunas de sus escenas en una declaración de intenciones que va más allá de lo estético.