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CRISIS COVID-19

El coronavirus desploma la taquilla estadounidense hasta su mínimo histórico

La pandemia mundial azota con fuerza a la industria cinematográfica desde hace varias semanas.

Gonzalo Franco
Por Gonzalo Franco Más 23 de Marzo 2020 | 12:57
Periodista especializado en cine y televisión a tiempo parcial, fan de Star Wars a jornada completa.

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El coronavirus sigue expandiéndose y arrasando con todo allá por donde pasa. Con Europa sumida ya en el caos, Estados Unidos está empezando a notar los efectos del COVID-19 tanto a nivel social como, evidentemente, en su economía. Con la mayoría de los cines del país cerrados, los números en taquilla han sufrido un descenso sin precedentes.

Los cines se desploman

The Hollywood Reporter publicaba la noticia de que las 440 salas que aún continúan abiertas (apenas un 8% del total), tan solo consiguieron recaudar 300.000 dólares el pasado miércoles. Comparando con la misma fecha del año anterior, cuando la venta de entradas alcanzó los 11 millones de dólares, la cifra actual supone una caída interanual del 97%.

Y aunque algunos autocines, que sí se encuentran abiertos, no registran sus ventas, los expertos ya consideran este descenso como el más importante de la historia: "300.000 dólares es, sin duda, el número más bajo en la historia moderna para un solo día de la semana".

Al límite de la bancarrota

Mientras la pandemia continúa cerrando salas, Variety recoge que los exhibidores piden al Congreso de Estados Unidos que tomen medidas urgentes para garantizar una ayuda que se antoja cada vez más esencial. Encabezados por John Fithian, la Asociación Nacional de Propietarios de Salas ha exigido un paquete de ayudas extraordinarias que garanticen su supervivencia. Porque, según explican, de no tomarse estas medidas las empresas acabarán pronto en bancarrota.

"De la noche a la mañana, hemos pasamos de ser una industria que gana 15 mil millones de dólares al año -11 mil millones en venta de entradas y 4 mil millones en concesiones- a una que no va a hacer un centavo en tres o cuatro meses", argumentó Fithian. Las próximas semanas serán clave para el futuro del negocio de los cines.